Escribe: Diego Pellegrini (h)
Con la necesidad imperiosa de sumar los tres puntos para no perderle pisada al puntero, Alem pasó por barrio Mariano Moreno y cumplió. Derrotó 2 a 0 a Unión Central y demostró que sigue firme en la lucha por el título.
Si bien es cierto que los dirigidos por Heraldo Pereno corren desde atrás a Rivadavia, saben que todavía falta mucho camino por recorrer y deben enfrentar al cabralense en La Leonera, en la próxima fecha.
Lo cierto es que ayer, Alem manejó el encuentro y gracias a dos conversiones en el primer tiempo, pudo tener la tranquilidad como para desarrollar el resto del partido casi sin sobresaltos.
Apoyado en el trabajo de sus volantes centrales, Pablo Fernández y Diego Acosta, los visitantes marcaron territorio e impidieron el accionar del alicaído Unión Central.
El juego mostró al visitante con mayor tenencia del balón y con ese fundamento el cotejo se jugó siempre más cerca del arco defendido por Federico Maldonado, portero del aurinegro.
En la primera situación clara que tuvo la visita ya sacó ventajas. Fue a los 13 minutos, cuando Fernández tomó la pelota recostado por derecha y sacó un perfecto remate, desde casi 30 metros, que se metió por encima de la humanidad del número uno. Golazo y tranquilidad para los de Pereno.
Néstor Vicario pedía serenidad a los suyos pero no encontraba respuestas en sus jugadores. Unión poco podía hacer ante la presencia del tricolor.
Sólo un disparo de Javier Ledesma, que aguantó en el área y envió por arriba del travesaño, fue la aproximación más clara del local.
El juego colectivo de Alem no era el más vistoso, pero Acosta ganaba cada vez que intervenía, Fernández la entregaba redonda y con esto era suficiente. El tricolor era más.
El fundamento llegó a los 35’, cuando Fernández entregó entrecortada para Matías Bendazzi, que habilitó a Cesar Rodríguez para que defina al gol con el arco vacío. 2 a 0 y alegría villanovense.
Daba la impresión que por lo entregado por Unión y por el potencial de Alem, el encuentro estaba casi liquidado.
El complemento poco le otorgó al espectáculo. El local salió más decidido en busca de Montiel, pero todas las ideas de los delanteros de Unión (Prado y Farinone) chocaron con la seguridad entregada por Gastón López y compañía. Por consiguiente, sólo algunos tiros libres de Leonardo Márquez y de Jorge Ledesma incomodaron al portero tricolor.
Esta propuesta de los villamarienses le entregó espacios a los visitantes para que puedan explotar su velocidad. De esta manera, llegaron algunas posibilidades de gol que podrían haber aumentado el marcador.
Y la más clara e increíble fue a los 20 minutos, cuando nuevamente Bendazzi (al igual que en el gol) dejó solo a Rodríguez para que éste defina con la valla vacía, pero sorprendentemente César la tiró afuera.
También Bendazzi tuvo un disparo desviado que se fue cerca, otra de Le Roux que nunca pudo rematar cuando estaba frente al arquero y un cabezazo de Acosta que pedía gol pero fue despejado en la línea.
Todas situaciones que marcan que Alem fue más, se dio el lujo de hacer cambios y cuidar a titulares importantes como Fernández y Ceballos, y nunca perdió la intensidad de juego.
Alem no afloja. Está decidido a luchar hasta el final sabiendo que se viene lo mejor. El tramo de la definición con Rivadavia incluido.

La figura
Pablo Fernández convirtió el primero de los goles desde 25 metros, un golazo. Inició la jugada del segundo, con un pase entrecortado. Manejó los hilos del equipo junto a Diego Acosta, otro para destacar.

El árbitro
Marcelo Villagra tuvo una actuación aceptable. No cometió grandes errores y llevó el partido por carriles normales, aún cuando los protagonistas protestaban.