Comenzó anoche una triple jornada de sanación en la Catedral de Alabanza de avenida Libertad 625, que encabeza el pastor Guillermo De Cuadra.
Esta actividad se inicia en momentos en que los asistentes a la iglesia lo demandan y cuando se habla de hechos "sobrenaturales" acaecidos en los últimos tiempos.
Son tres noches de sanidad física y del alma. Hoy comenzará a las 20.30 y mañana a las 19. Dura dos horas aproximadamente. Así lo señaló De Cuadra, quien en compañía del pastor Walter Ledesma, quien llegó desde Buenos Aires para predicar y compartir el mensaje, dialogó con EL DIARIO en el templo.
Además, hoy a las 23 se adjudicarán los tres premios (una motocicleta de 110 cc, un televisor y un DVD) pertenecientes a un bono que se había puesto a la venta a 25 pesos, para colaborar con la sede edilicia, ya que se está por terminar el techo de un salón que comenzó a construirse hace dos años y que tiene capacidad para 300 personas.
Guillermo apuntó que a las reuniones dominicales suelen concurrir hasta 140 personas, lo que lo ve como muy significativo "para una iglesia que tiene sólo tres años".
s Buscan refugio

Estas noches de sanidad son las primeras que se efectuarán en esta iglesia y se hace por la demanda de los creyentes, así como también "para llamar la atención de la gente a que busquen a Dios y así poder cambiar sus vidas".
"La gente lo pide y también se vienen viendo cosas sobrenaturales. Dios ha sanado a enfermos de cáncer y también hemos visto que una mujer, que se encontraba poseída por demonios, logró sacarlos adelante de todos. En ese momento, salió una víbora de la espalda, la matamos y esa señora hoy está viviendo normalmente", aseguró el pastor.
Los vecinos "tienen problemas espirituales y sólo con Dios se pueden sanar, en donde se mueve Dios la gente será libre de todo eso", explicó a EL DIARIO.

s El aborto, las
sectas y la
homosexualidad

En su charla con este matutino, el pastor condenó el aborto. "Nosotros nos regimos por la Biblia y la Biblia condena el asesinato. Y un aborto lo es", remarcó. Luego dijo que hay métodos para prevenir los embarazos no deseados. Consultado sobre una violación, opinó que "a la vida la da Dios y hay veces en que suceden cosas que no entendemos, pero más allá de la violación, que es algo muy penoso, Dios puede restaurar ese corazón", a la vez que recalcó el derecho a la vida.
En cuanto a la penetración de la droga en la sociedad, lo atribuyó a "hogares mal constituidos, a padres que se separan, a hijos que se refugian en la computadora o en la televisión, viendo cosas que no convienen". Por otro lado, se manifestó en desacuerdo con la homosexualidad, ya que "Dios creó al hombre y a la mujer". Consultado sobre si no era discriminatoria la Iglesia, enfatizó que no: "No es discriminar, es obedecer la palabra de Dios". Luego, advirtió que "no está en nosotros juzgar a la persona, sino en cambiarla. Nosotros recibiríamos con gusto a una pareja del mismo sexo, no condenamos, los acompañamos y los queremos, pero tiene que haber intención de cambiar".
Al señalarle declaraciones del obispo de la Iglesia Católica villamariense, José Rovai, respecto a que pululaban las sectas en la zona, Guillermo remarcó: "Nosotros enseñamos a la gente la Biblia, y no le escondemos nada ni nos apartamos de la palabra de la Biblia. Cumplimos la palabra de Dios".
"Muchos encuentran aquí la paz y compañerismo. Nosotros somos una gran familia. Y en una familia hay de todo, pero lo bueno es que uno encuentra gente que te cuida y que te ayuda", cerró.