Hoy cumplo un año de, en cierta forma, volver a vivir, ya que a esta fecha el año pasado fui trasplantado de un pulmón en la Fundación Favaloro. Por tal motivo quiero hacer público mi agradecimiento a todas las personas que me asistieron y acompañaron.
En primer lugar a mi esposa Lucía, la cual ha estado en todo momento a mi lado, con lo que implica estar tras un enfermo. Muchos se sorprenderán al saber que todo el tratamiento me lo cubrió la mutual PAMI, pero la burocracia es grande y para eso hay que tener mucha paciencia, por lo cual gracias Lucía.
A mis hijos y familiares que me acompañaron desde aquí y a los que en algún momento se llegaron a la Capital Federal, donde pasé un año de mi vida.
A los médicos de la ciudad que tanto antes como ahora siguen de cerca mi mejoría, Juan Zazzetti y Rebeca Nicoletti, el neumonólogo y mi médica de cabecera respectivamente, aunque hoy no son más ni mi médica de cabecera ni mi neumonólogo, por razones de reempadronamiento de la ya mencionada burocracia. Sin embargo están siempre atentos a mi mejoría.
A Jimena Rey, quien es la encargada de mi rehabilitación cardiopulmonar.
A Osvaldo Rodríguez, secretario de Finanzas de la UOCRA Buenos Aires.
A todas las personas de esta ciudad que conociéndome o no, han pedido por mi salud y se han interesado por mi evolución en el transcurso del año que estuve en Buenos Aires.
Por último, a los que hicieron de mí lo que hoy soy: a la Fundación Favaloro, y todo el equipo profesional y humano en general (médicos, enfermeras, mucamas) que compone dicha institución, por mencionar a algunos y sin ofender a quienes no los nombré, a todos gracias: a Juan Manuel Ossés, mi primer contacto con la Fundación, Rosalía Ahumada y Graciela Wagner, del equipo médico de Ossés, los cirujanos Roberto Favaloro, Alejandro Bertolotti y todo su equipo de cirugía.

Nelson Domingo Airaldi
DNI 6.607.190