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Piva dejó el templo de barrio Ameghino en los últimos días de marzo |
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En absoluta discreción, Gustavo Piva (34) dejó el sacerdocio en los últimos días de marzo, pero la noticia se confirmó oficialmente recién en la noche del martes.
De acuerdo a los datos que pudo reunir EL DIARIO, el obispo diocesano José Angel Rovai se hizo presente anteanoche en la Parroquia Nuestra Señora de Lourdes y comunicó la novedad a los miembros del Concejo Parroquial. Ese templo estaba a cargo del ahora ex cura desde 2004, cuando monseñor Roberto Rodríguez, por entonces titular de la Diócesis villamariense (hoy en La Rioja), decidió que remplace a Fabián Gilli.
La renuncia sorprendió a muchos y fue confirmada en el mediodía de la víspera por una fuente del Obispado a EL DIARIO: “Es una decisión personal, muy privada. No hay una cuestión amorosa ni nada por el estilo”, aseguró la persona consultada por este matutino.
Piva, oriundo de Marcos Juárez, prefirió irse de Villa María, aunque tampoco estaría en su ciudad natal. Anteanoche eligió no estar en la “despedida oficial” en la Lourdes, cuando estuvo presente Rovai. Fuentes eclesiásticas especulaban ayer que regresaría más adelante al templo que ocupó en los últimos seis años (primero como vicario y ya luego como párroco) para saludar a los fieles.
Momentáneamente quedó al frente de la parroquia de barrio Ameghino el vicario Gustavo Gatto, mano derecha de Piva, hasta tanto monseñor designe a otro pastor.
Consultado por este cronista, Gatto se excusó de dar detalles: “Nosotros debemos cuidar tanto a la persona, como a la comunidad religiosa”, argumentó.
s De viaje
Según distintas fuentes, Piva fue un cura propenso a misionar. Solía viajar a menudo, aunque en las últimas semanas su ausencia fue por demás notoria, a tal punto que eso motivó la suspensión de la tradicional cena que se realiza después de Pascuas para juntar fondos para las tareas de evangelización y caridad.
Piva le habría comunicado a Rovai su decisión de abandonar el ministerio tres días antes que el obispo volara a Roma para encontrarse con el Papa. El alto dignatario de la Iglesia le pidió al ex sacerdote que meditara su decisión, pero cuando estaba en Italia el vicario de la Diócesis le informó que Piva le confió que no había marcha atrás.
Desde el 23 de marzo las ceremonias religiosas fueron oficiadas por Gatto y comenzaron las especulaciones.
“Es un cura con buena imagen, simpático, entrador, pero hay quienes le reprochaban estar de viaje asiduamente”, confió alguien que conoce intimidades del Concejo Parroquial.
Dos veces al año convocaba a la prensa para anunciar las cenas de beneficencia en el Club Ameghino, que tienen la finalidad de reunir a las familias y colaborar con las obras de evangelización y caridad, y aceptaba preguntas de los periodistas sobre política y economía. En los dos comedores a cargo de la Lourdes (situados en barrio Felipe Botta y San Nicolás) se brindan apoyo escolar y alimentación a casi 300 chicos, beneficiados con lo recaudado en los citados eventos.
Comprometido a la hora de hablar sobre la realidad social, también incursionó en la polémica, llegando incluso a los medios provinciales con sus dichos. Fue cuando en 2005 cometió el exabrupto de decir que los homosexuales eran enfermos y le hacían daño a la sociedad, en el marco de la apertura de un boliche alternativo en Las Mojarras, en donde la capilla está bajo la órbita de la parroquia Lourdes.
Diego Bengoa
Frases que hablan de su compromiso
El ahora ex sacerdote Gustavo Piva se expresó sobre distintos temas en diferentes conversaciones mantenidas con EL DIARIO, en el último año. Las que siguen son algunas de sus frases:
- “Debe haber un orden de trabajo, porque no se puede hermosear la ciudad descuidando otras realidades. No se puede tener una localidad muy linda dentro de los cuatro bulevares y descuidar zonas de marginación muy grandes.
La prostitución, que no solamente se expresa en la ruta, porque en el bulevar Alvear hay ofertas de sexo en las esquinas, es un flagelo que habla de la ciudad.
Yo me preguntaría cómo conocen los demás a Villa María. ¿Por ser una sociedad pujante, por el subnivel y su hermosa costanera o por otra cosa? Hoy queda en la mentalidad de muchos la famosa ruta pesada. Es una carga histórica que llevará esta población y que hay que revertirla. Hay que erradicar estos males, no por la ciudad, sino por las personas que están allí, quienes han caído en la explotación sexual, en la droga y el alcohol.”
- “La mayoría de las jovencitas vienen engañadas, es algo que hablamos muchas veces con las hermanas (monjas). Las traen con la excusa de que van a trabajar en casas de familias y las terminan obligando a ejercer la prostitución. Creo que ninguna mujer lo hace por placer, sino que hay una necesidad mucho más profunda y falta de alternativas.”
- “Estamos en una sociedad muy marcada por el consumismo: valés por lo que tenés, no por lo que sos.”
- “Por proteger al adolescente nos estamos yendo a la otra punta. Hoy se permite todo, no hay reglas, hay mucho permisismo. Es necesario implementar límites.”
- “Veo en los barrios cómo se queda afuera del sistema educativo. Y así se transforman en personas potenciales de caer en el flagelo de la droga, la delincuencia, la vagancia. Están todo el día en la calle, no ven otra cosa y no tienen posibilidades.”
- “El discurso manipula muchísimo y desde una realidad que moviliza. Se moviliza a masas desde los discursos, pero eso queda en la retórica. Del dicho al hecho hay un trecho.”
- “Cuando se hablaba de las retenciones (a las exportaciones de soja), se argumentaban desde la redistribución de la riqueza y se hablaba de pobreza. Habría que ver qué entienden por pobreza.”
- “Vemos que se gobierna desde y por los intereses partidarios y no del pueblo.”
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