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El grupo junto al productor Vengoechea, en estudio La Púa |
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Primer mandamiento de un grupo musical católico en ascenso: cantarás pop gospel con contenido social. Segundo mandamiento: competirás en concursos internacionales y grabarás un disco, gracias a Dios.
El conjunto villamariense El Grito de Abel había obtenido en 2008 el primer premio en el destacado certamen "Operación Cristo", que convocara a artistas católicos de habla hispana de América Latina y España.
El llamado, organizado por la disquera colombiana CMG Records en conjunto con la Fundación Edificar, fue realizado en enero del año pasado. La banda local, compuesta por Domingo "Mingo" Medina (compositor y guitarra), Lucas Sigifredo (tecladista y productor) y Sebastián Rosa (cantante), había enviado un demo con tres temas. Se trataban de "Blanca luna", "Sabes de mí" y, la gran ganadora, "Corre", pertenecientes al primer disco titulado "Buscando la gran ciudad" (2005), que contara con la coproducción de Enrique "Cacho" Aiello.
El máximo galardón consistió en el derecho a editar un trabajo discográfico inédito para ser desarrollado, promovido y distribuido en Estados Unidos, España y Latinoamérica, además de formar parte de un compilado junto a los diez mejores grupos del concurso.
El jurado del concurso estuvo integrado por Douglas Archer (director de una red de música católica y director de programas en español de la cadena de televisión EWTN, que en Villa María se emite por Multicanal), Carlos Javier Montes (integrante del grupo Son By Four) y Pedro Vengoechea Jacome (productor y arreglador musical de reconocida trayectoria en Colombia, votante en los Grammy Latinos y productor de un referente del merengue Wilfredo Vargas).
Precisamente Vengoechea fue quien aterrizó en nuestra ciudad en agosto del año pasado para trabajar con la banda en el armado de los temas del nuevo álbum. Tras varias sesiones de composición y diseño, el productor regresó a Colombia con las "maquetas" (las primeras versiones) de las canciones en cuestión.
Transcurrieron ocho meses para que Vengoechea volviera a estas latitudes con las bases ya realizadas por músicos sesionistas de aquel país y comenzara la etapa de grabación en la Villa (por requisito del grupo). Ayer ingresaron al estudio La Púa Records de Mateo Oviedo, los músicos y el productor para darle forma definitiva al disco que todavía no tiene título pero sí fecha de publicación: en el próximo mes de agosto saldrá el sencillo de difusión y luego el CD.
Otro perfil
"Creo que ganamos el concurso porque tenemos un perfil más pop con letras que, aunque hablen de un compromiso social con sentido evangelizador, no son tan explícitas sobre Dios o la religión. Somos como más amplios", explica Medina a EL DIARIO.
La génesis del grupo data de 2004, cuando los integrantes de la extinta formación de La Viajera Blues deciden dejar detrás su costado más "rock power" para hundirse en las sensibilidades del pop y el funk. Temas del nuevo disco con títulos como "Es tu amor" y "Pálida señal" tenderían a probar dicha opción. El nombre del grupo da cuenta de la cita bíblica donde Dios le advierte a Caín que la voz de su hermano Abel clamará por su nombre. "En un principio queríamos contar con el espíritu de esa frase, como dándole voz a aquellos que no la tienen", señala Mingo.
"No somos bien vistos en nuestras comunidades"
Vale decir que el mercado de la música gospel en general mueve millones de personas y dólares en todo el continente. "En América Latina es algo normal y masivo lo de un grupo religioso cantando rock, pop o lo que sea, tanto en el catolicismo como en las congregaciones evangélicas que son las más propicias para este mercado. Es más, cualquiera de estos grupos se escuchan en cualquier radio. Acá en Argentina todavía está muy sectorizado, el único grupo que pudo saltar un poco más es Rescate. Todavía se identifica a un grupo gospel con un coro y una guitarrita", subrayó.
Del mismo modo, señaló: "Es irónico pero por haber elegido este camino no somos muy bien vistos en nuestras propias comunidades, que supuestamente es la gente que nos tendría que consumir". Por lo pronto, El Grito de Abel -que a la par está realizando un videoclip con la productora local Ayllú- espera arribar a nuevos circuitos de difusión y promoción. Si Dios quiere.
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