Viven en dos extremos de la ciudad pero los unen situaciones similares: reclamos vecinales que, hasta el momento, no han sido tomados en cuenta por las autoridades.
En esta oportunidad nos referimos puntualmente a los vecinos de la calle Arturo M. Bas en barrio Las Playas y los frentistas que residen en las cercanías de la intersección de Corrientes y Rivadavia en barrio Centro sur.
En ambos casos las temáticas (contaminación y seguridad vial) se predican como prioridad por el Gobierno municipal pero, por razones que se desconocen, aún no han encontrado un destino que satisfaga a los ciudadanos que reclaman.

@ Calle tomada

Un montículo de tierra y basura impide el paso de los vehículos por la calle Arturo M. Bas al 1200.
Según los vecinos, la acumulación de desperdicios y tierra tapó la arteria hace un año, y los transeúntes optaron por practicar un desvío en un terreno poblado de árboles, para sortear el taponamiento.
El sector, manifestó el vecindario a EL DIARIO, adolece de numerosos inconvenientes derivados de la clausura de la calle Bas: por ejemplo, no circula el regador, ni el recolector ni la motoniveladora.
Por añadidura, cada tanto los chicos del barrio practican puntería contra el alumbrado público, con lo cual la zona se convierte en un lugar digno de temer en horas nocturnas.
La preocupación por la higiene del sector aumentó en la población, en esta época en que desde el propio Estado se habla de la limpieza de los terrenos baldíos por parte de los propietarios.
En la mencionada zona, por otra parte, hay vehículos abandonados desde hace años.

@ Falta semáforo

En los primeros días de mayo de 2008, cerca de 300 vecinos de barrio Centro sur pidieron, a través de una nota al intendente, la colocación de un semáforo en la intersección de las calles Corrientes y Rivadavia.
“(...) la calle Rivadavia constituye una conexión directa, a través del puente Alberdi, con la ciudad de Villa Nueva y la ruta 8, situación que incrementa el tránsito vehicular. Cabe recalcar que con el subnivel, el tráfico de la calle Corrientes se ha intensificado, aumentando de esta forma el riesgo de accidentes”, señala la misiva rubricada por centenares de frentistas.
“(El semáforo) constituye un elemento indispensable de contención, para así evitar los accidentes que se producen con frecuencia en la intersección de las arterias”, fundamenta la carta que sigue sin ser contestada desde el municipio.
@ Preocupante situación: Baños rotos en la escuela Nicolás Avellaneda

Otra preocupante situación debe afrontar la escuela Nicolás Avellaneda. Luego de sostener, por largo tiempo, el servicio educativo en un edificio absolutamente deteriorado, sufriendo robos y actos vandálicos, un nuevo hecho se suma a las desventuras de la comunidad educativa.
La rotura de los baños, con el obvio riesgo sanitario para los alumnos que asisten a la escuela, se añade entonces a la larga lista de inconvenientes de la institución.
“La gente de la empresa que está refaccionando el edificio no va a hacer hasta el momento (según lo expresado por el encargado) ningún arreglo en los baños”, manifestó con preocupación a EL DIARIO la directora Ana María Girardi.
“Estamos funcionando con los pocos sanitarios que quedan para los varones y niñas. Cuando se empiezan a utilizar el olor es insoportable”, enfatizó la docente consultada.
“Nosotros estamos prácticamente dentro de los baños ya que la oficina de la Dirección y la Cocina están muy cerca de los mismos. No se puede estar así”, insistió Girardi.
Vale destacar que en la institución se está concluyendo con las reparaciones del sector del jardín de infantes.
Por su parte todas las demás modificaciones en el edificio estarían terminadas recién en diciembre.