Si bien estaba previsto que Gabriel Miranda, acusado de haber dado muerte con un arma blanca a Aldo Rimoldi durante una pelea, fuera trasladado ayer a la Unidad Penitenciaria Número 5 de esta ciudad, tanto su defensor como la Fiscalía entendieron que era conveniente que continuara “alojado unos días más en la Comisaría, por cuestiones de salud”, dijo a EL DIARIO el fiscal Gustavo Atienza en diálogo telefónico.
Aunque el funcionario judicial que investiga el hecho prefirió mantener en reserva los pormenores, aseguró que en cuanto a las heridas y puntazos que tiene el acusado en el cuerpo “no requieren de internación para ser curadas y atendidas, pueden ser tratadas en la propia Comisaría. Pero todo acusado tiene derecho a ser asistido tanto por el médico policial como por su médico de confianza o cabecera” y éste sería el caso de Miranda.
No obstante, otras fuentes consultadas aseguraron que el detenido se encuentra en un estado emocional muy frágil y necesita una asistencia médica especializada, razón por la cual se resolvió que era conveniente mantenerlo alojado en la Comisaría, donde, aparte de tener atención médica, recibe la visita de amigos y familiares.
El delicado estado de salud (especialmente emocional) en el que se encuentra Miranda, obliga también a poner en suspenso la indagatoria que debe hacerle el fiscal, la cual estaba prevista, en un principio, para los primeros días de la semana entrante.
Deudas
Miranda, aseguran, debía importantes sumas de dinero y no sólo a Rimoldi. Aparentemente, se trata de deudas de juego, ya que el acusado era aficionado al póker y concurría con asiduidad al casino.
No obstante, la discusión en la que terminó herido de muerte Rimoldi, comenzó aparentemente por unos cheques.
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