Un necochense de 37 años de edad fue condenado ayer por la Cámara del Crimen de Villa María por un delito de menor entidad, pero continuará en la cárcel porque tiene otras dos causas pendientes con la Justicia bonaerense y una tercera en el Juzgado Federal de Bell Ville.
Se trata de Claudio Sergio Benavídez, quien recibió una pena de 11 meses de prisión de cumplimiento efectivo por un hecho de "violación de domicilio", además de ser declarado reincidente
Benavídez, nacido en Necochea el 25 de noviembre de 1971, pero radicado desde hace algún tiempo en Lácar y Aconcagua, en barrio Los Olmos de esta ciudad, se encuentra detenido desde el 6 de julio del año pasado, luego que ingresara sin autorización al patio de una vivienda ubicada en ese sector de la ciudad, habitada por Eva Leroux.
Al iniciarse el proceso judicial, se estableció que Benavídez registraba un antecedente penal por haber sido condenado a nueve años de prisión en Mar del Plata por un "robo calificado". Asimismo, el fiscal que instruyó la causa por la "violación de domicilio" detectó que también tenía una causa pendiente en la ciudad atlántica y otra en Necochea, a las que se agregó una tercera (por "circulación de moneda falsa") que quedó radicada en el Juzgado Federal de Bell Ville.
Como esos tres procesos están en plena etapa de instrucción, la sentencia de la víspera será remitida a los Tribunales marplatenses donde, oportunamente, se unificarán la condena aplicada en Villa María con aquella de nueve años, y las que puedan imponérsele por las restantes causas, si es que llega a ser declarado culpable.
Por lo pronto, esto indica que Benavídez estará un largo tiempo tras las rejas, y para hacer frente a los otros procesos judiciales tendrá que ser trasladado a Mar del Plata y luego a Bell Ville para comparecer en diferentes juicios orales.

Juicio abreviado

En tanto, el de ayer fue de trámite abreviado porque este reincidente presidiario reconoció su responsabilidad penal en el hecho que se le atribuía, con lo cual se omitió la recepción de pruebas testimoniales en la sala.
La audiencia de debate fue presidida por la camarista Silvia Saslavsky de Camandone y contó con la participación del fiscal Correccional, Horacio Vázquez, y del abogado Antonio Broggi (ejerció la defensa de Benavídez), mientras que el secretario actuante fue Roberto Jue.