Celebramos este 1 de Mayo el "Día del Trabajador", recordando el acontecimiento que nace de hechos históricos lamentables, de los cuales comienzan las reivindicaciones del empleo y del merecido derecho de dignificar a todos aquellos que sustentan su vida a través del trabajo.
Hecho histórico luctuoso que clama al cielo por miles de años, tal como expresa el texto en la cita bíblica señalada en el inicio de esta salutación.
Deseamos acompañar a todos los trabajadores de nuestra ciudad y, por supuesto, del mundo, afirmando y sosteniendo lo que expresa la Iglesia, teniendo en cuenta sus derechos, que se basan en la naturaleza de la persona humana y en su dignidad trascendente.
Derecho a una remuneración justa, al descanso dominical (que seguimos afirmando debe seguir siendo el día domingo), el derecho a que en los ambientes de trabajo y la producción no comporten perjuicio para la salud física ni dañen su integridad moral, derecho a salvaguardar la propia personalidad en sus lugares de trabajo, derecho para que el Estado provea para la subsistencia de los desocupados, derecho a la pensión y seguridad social, por la vejez, enfermedad, accidentes, maternidad, también para reunirse y asociarse.
Bien sabemos que muchos de estos derechos no se cumplen y que, en más de una oportunidad, los gobiernos acuerdan con sectores poderosos del empresariado nacional y trasnacional, conculcándolos.
("...el trabajo... constituye una dimensión fundamental de la existencia del hombre en la Tierra, por la cual el hombre y la mujer se realizan a sí mismos, como seres humanos. El trabajo garantiza la dignidad y la libertad del hombre, es probablemente la clave esencial de toda 'la cuestión social'" (doc de Aparecida 120)
(Dice la Biblia, en Deuteronomio 24, versículos 14/15: "No explotarás al jornalero humilde y pobre, ya sea uno de tus hermanos o un forastero que residen en tu tierra, en tus ciudades. El mismo día le darás su salario, y el sol no se pondrá sobre esta deuda porque es pobre y de ese salario depende su vida. Así no clamará contra ti a Dios y no te cargarás con el pecado".)
@ Invitación
El Equipo de Pastoral Social de la Iglesia Catedral de Villa María, en razón de la celebración a concretarse mañana, invita a todos los trabajadores a participar de la misa que oficiará el obispo diocesano, monseñor José Angel Rovai, este viernes 1º de Mayo.
La ceremonia religiosa comenzará a las 10 y tendrá lugar en la capilla San José Obrero, situada en Mendoza 150, en barrio Parque General Paz.
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