Escribe Juan José Coronell
Especial para EL DIARIO

Se fundó en 1864 bajo el nombre de Villa del Tránsito por el presbítero Francisco Aguirre. Sin embargo, en 1916 el entonces gobernador Dr. Ramón J. Cárcano decidió cambiarle el nombre a Villa Cura Brochero conmemorando el segundo aniversario de la muerte del cura gaucho.

Sus lugares…

Entre las cosas que hay por conocer, vamos a detallar algunas. En primer lugar empezaremos hablando de la plaza Centenario, un punto clave de la Villa. Mantiene intactas sus antiguas dimensiones. Desde allí se puede ver la iglesia Nuestra Señora del Tránsito (foto). Esta iglesia tuvo varias construcciones, hasta que en 1914 se la mejora introduciendo dos naves al lado de la central. Tal vez la más importante es la izquierda, ya que desde 1994 en ella descansan los restos de Brochero.
Y ya que hablamos del cura gaucho, el Museo Brocheriano nos invita, desde 1957, a ver, conocer y sentirnos parte de la historia del pueblo. Con testimonios, objetos tanto de la vida de Brochero como de sus habitantes antiguos y de los que vivían en la zona. Con once salas para no dejar de sorprenderse, se encuentra al lado de la iglesia.
Por último, y para continuar con lo que nos recuerda al cura, podemos visitar la modesta casa donde pasó sus últimos días. A metros de la plaza, y construida en el Siglo XIX nos espera este lugar tan importante. Hasta el día de hoy se puede observar la tirantería de madera en el techo y los antiguos ladrillos que se usaban en esa época.

Naturaleza pura…

Antes de continuar con la historia y el personaje del lugar, vamos a comentar ciertas actividades para aquellos que aman la naturaleza.
En el primer lugar, el río Panaholma y sus playas son un lugar para conocer y agendar para los días en que el clima nos permita disfrutar de sus aguas. Aunque vale aclarar que en las tardes de otoño, con el sol queda un paisaje imponente y la relajación como alternativa.
La costanera del lugar cuenta con dos balnearios de mucha concurrencia el municipal y Los Cedros que son testigos de tardes interminables de cartas, mates y lectura. Además cuentan con asadores y servicios para que la familia pase un día agradable.
Para finalizar este apartado, nos vamos a ir un poco de la Villa, pero no lejos. Cerca de allí por el camino hacia Toro Muerto, podemos encontrar Takku Yacana, un establecimiento de ecoturismo con 7 hectáreas de campo y la posibilidad de ver especies autóctonas y un zoo de llamas.

El legado del cura…

José Gabriel del Rosario Brochero es el famoso cura Brochero. Una figura a la que siempre se la reconoce entre las tantas religiosas. Este cura realizó varias obras entre ellas la iglesia y la plaza del lugar.
Siempre preocupado por los demás, peleó por la igualdad de todos los habitantes del lugar. Con su caballo siempre visitó a los serranos en sus ranchos, construyó acequias, fundó escuelas y capillas marcando un antes y un después en el ejercicio del sacerdocio.
A pesar de los años, nadie se olvida de Brochero y pareciera que la devoción aumenta con el paso del tiempo, así lo demuestran las cabalgatas que salen desde Córdoba capital hasta el pueblo, para recorrer los caminos que transitó el Siervo de Dios como lo consideran en la zona.
Contactos:
Teléfono: oficina de Turismo:(03544) 470022
villacurabrochero@traslasierras.com