@Pedido de una madre Señor director: Me llamo Silvia, tengo 38 años, un hijo de 5 y mi esposo, Ulises, de 40 años. Me atrevo a enviarle este mail, movida por la desesperación como madre, como esposa de alguien que necesita trabajar. Usted se preguntará qué es lo que lleva a una mujer a este tipo de cosas, es decir, el tener que pedir casi por favor una ayuda. Lo que me lleva a mí en este caso es la terrible situación que estamos atravesando en estos momentos, por la falta de empleo de mi esposo. Y cuando pasan estas cosas, no sirve el orgullo ni la vergüenza... sólo queda, como decimos vulgarmente, dar los últimos manotazos de ahogado. Mi esposo es un ser excepcional, trabajador, decente, híper capacitado, con varias tecnicaturas. Posee registro profesional de cargas generales, CNRT, psicofísico aprobado; es decir, todo en regla, como para acceder a un puesto de chofer de camión, ya que también posee mucha experiencia en ello. Pero bueno, la situación es ésta, y dadas las circunstancia de haberse presentado en muchas empresas, enviado cientos de currículums, y no tener una respuesta, me atreví a escribir esta carta. Supongo que el que sea padre, comprenderá mi situación, que en verdad, no es exagerada... Ya no tenemos dinero para darle de comer a nuestro hijo. No quiero ponerme en víctima, no pido ayuda económica, sólo TRABAJO. Por favor, necesitaría algún tipo de ayuda... alguna comunicación telefónica, una mano solidaria. Si se requiere, mi esposo puede enviar el currículum. No tiene inconvenientes en viajar a ningún sitio del país. Sinceramente, no sé cómo será recibida mi carta, sólo espero que esto sea difundido y llegue a manos de algún empresario que necesite los servicios de un simple chofer, que puede dar mucho y tiene mucho para brindar: honestidad, capacidad... Eternamente agradecida y que Dios bendiga a quien lea esta carta. Silvia Santagatti DNI 21738008 silviamaria_913@hotmail.com @Responde a otro lector Sr. director: En la edición del día lunes leí turbado en la sección "Los lectores también escriben", una suerte de carta abierta suscripta por el Sr. José F. Borrini (h), dirigida al Sr. intendente de la ciudad, Eduardo Luis Accastello, titulada "Sr. intendente, no sea hipócrita". Haciendo abstracción de que, en nada acuerdo con el Sr. Borrini, es dable hacer notar que el tono de lo vertido en su nota, deja al descubierto, más que nada una cuestión personal con el Sr. intendente. Sin perjuicio de ello, se deslizan en dicho libelo, cuestiones demasiado graves como la acusación vertida en el punto cuatro del mismo. Debo decir que opino que no es la sección de un diario el ámbito donde deben dirimirse estas cuestiones, sino en el ámbito judicial, toda vez que se está hablando de delitos. Es así como lo hizo en Santiago del Estero en el año 1995 un ciudadano contra Juan Schiaretti, luego de su nefasto paso como interventor federal de esa provincia. Conozco esto por ser santiagueño y amigo de quien presentó la denuncia. En cuanto a la gestión de Accastello, debo referenciar que hace un año que me encuentro residiendo en esta ciudad, la que nunca me resultó indiferente, dado que mi padre nació aquí. Antes que existiera la ruta nacional 34, con mi familia pasábamos siempre por esta ciudad al dirigirnos a Santa Fe, donde vivía mi abuelo. Un café era siempre un buen pretexto de mi padre para estar, aunque sea un momento, en el lugar donde nació. Ya en el año 2000 mi hijo mayor decide empezar a estudiar música en la UNVM y a partir de allí visitamos regularmente esta ciudad, hasta que el año pasado decidimos radicarnos aquí. Anémico y hasta inútil resulta, comparando la realidad, pretender reflejar en un escrito el desbordante crecimiento de esta ciudad en estos últimos nueve años. No creo que los villamarienses tomen conciencia de esto. Si bien lo escuché decir en numerosas oportunidades, estoy seguro que no dimensionan con exactitud el adelanto y la belleza de esta ciudad. Obras públicas como el subnivel, La medioteca, las cloacas, por nombrar, la instalación de la misma Universidad, el Juzgado Federal, resultan de una superlativa importancia, tanto que me atrevo a decir que quizá alguna otra ciudad, por no decir ninguna, en el concierto nacional, han crecido en cantidad y calidad como Villa María. Es por ello que desconocer que la única manera de conseguir lo conseguido es fruto de una correcta administración municipal, es blandir una necedad rayana -ahora sí- en una hipocresía intelectual no exenta de una indisimulable mal intención que seguramente cobija un inconfesable interés personal. Gracias y lo saludo muy atentamente. Héctor Eduardo Font DNI 13603732 @Necesita su Cédula Sr. director: Espero pueda hacer algo por lo que le voy a contar y creo que este problema no me afecta en lo personal, sino a todos como sociedad. Desde el mes de diciembre de 2008 estoy intentando remplazar mi Cédula de Identidad, en la Policía Federal local me contestaron que la computadora estaba rota, que esperara un tiempo y consultara por si estaba arreglada. Consulté por el mismo trámite a comienzos del mes de febrero encontrando la misma respuesta. Después volví a comienzo del mes de abril, ya habían pasado cinco meses, y encontré la misma respuesta con el agravante de que además encontré la respuesta diciéndome que "lo más cerca para hacer ese trámite es Río Cuarto o Córdoba", con lo cual que no queda más que volver y seguir esperando. Ahora me pregunto: ¿es posible que se tarden más de cinco meses para poder reparar una computadora?, ¿no podrá remplazarse en un plazo menor? Espero puedan ayudar o tal vez agilizar la reparación de la computadora. Desde ya muchas gracias y lo saludo muy Atte. Franco A. Sarmiento DNI 28064419
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