Se desarrolló en la fábrica Pauny SA una charla de personal a cargo del ingeniero Guillermo Cane, asesor de empresas que intenta rescatar algunos aspectos para que las mismas puedan atravesar las crisis y aprovecharlas como una oportunidad para desarrollar, entre otros, el ejercicio del pensamiento con miras a la readaptación y superación de la compañía.
El encuentro se realizó en el área técnica del predio de Pauny y contó con la presencia de directivos y encargados de personal.
Hablar de la posibilidad de la mejora continua, un poco "esquivar" esta crisis que tanto nos identifica ya no digamos en la Argentina sino en el mundo, fue el eje planteado por Cane y recogido por el portal de Internet, LasVarillasVive.com
"El foco lo ponemos en cómo poder cruzar la crisis utilizando momentos en los que hay disponibilidad de intelecto. En épocas de alta nunca tenemos tiempo para pensar y readaptarnos, porque siempre hay mucho por hacer," disparó el disertante. Y agregó que "en épocas de baja hay empresas a las que les agarra 'parálisis intelectual', y dejan de hacer, entonces esto es una buena oportunidad que uno ve y hay que aprovechar los momentos en donde hay disponibilidad para pensar sobre qué cambios necesitamos para que cuando salgamos de la crisis estemos más fuertes".
Manifestó en ese aspecto que "es el momento donde más puede uno replantear, en crisis, porque dispone de la mayor capacidad posible de gente pensante, y cuando digo pensante hablo también de los operadores que son los que pueden hacer las mejoras continuas en los puestos de los procesos operativos".

Desde la firma

Parado desde la empresa recuperada varillense (hoy es una empresa de economía mixta integrada por jerárquicos, concesionarios y operarios en un 33% cada uno y el 1% restante el municipio como gestor de la recuperación a través de subsidios y planes sociales), Cane fue consultado sobre la responsabilidad social que debe tener el empresariado argentino: "Se escucha no tanto como uno quisiera hablar de esto, de todas maneras, Pauny lo tiene instaurado como política, así que valoro mucho el hecho de que ya esté explicitado el concepto, yendo un poquito más al fondo en lo que hace al hombre, a la persona que está dentro de la organización, en realidad lo que habría que lograr es un mayor agregado de valor, pero no un agregado de valor tangible puesto en el producto-servicio que se entrega, sino el valor con que el hombre siente que está aportando a la organización, ese valor se vuelca en creatividad, se vuelca en innovación y se vuelca principalmente en que alguien le reconozca el valor que agregó". "Es decir, la motivación de las personas es la base de la mejora continua y esa motivación no funcionaría si no le damos espacios para pensar y crear y espacios para valorar lo que creó. Esto sí es difícil de encontrar, son pocas las organizaciones que ven al recurso humano, mal dicho recurso humano, lo ven como una variable de ajuste, porque el humano no es un recurso sino parte del capital, es el activo de la compañía y el que hace la diferencia", sintetizó.
Para Cane, mirar al futuro significa tener esperanza, "y más que la esperanza el sueño de un punto al cual hay que llegar y no hay que quitarle el ojo a ese sueño, ese sueño está consensuado al nivel del liderazgo de una empresa y contra viento y marea hay que perseguir el sueño. Puede llevarnos más tiempo y puede desviarnos el camino en algún momento pero no desenfocarnos de esa visión", consideró.
Finalmente, señaló que encontró a la gente de Pauny "muy receptiva, muy autocrítica, porque parte de nuestro debate fue exponer en dónde se situaban ellos, por ejemplo, tener que reconocer en qué punto de una crisis puedan estar, y fue muy clara la posición del grupo. Muy positivo para encarar un proceso de estos, creo".