“Reconocimiento, monitoreo y umbral de las especies de gusano blanco como plaga en cultivos de invierno y maíces temprano”, fue el tema central de la actividad que concentró a más de ochenta productores, profesionales y estudiantes de agronomía.
Disertaron en la oportunidad el ingeniero agrónomo José María Imwinkelried, el biólogo Fernando Fava y el doctor Eduardo Trumper, pertenecientes a la sección Entomología de INTA Manfredi.
En diálogo con EL DIARIO RURAL, Imwinkelried explicó que el gusano blanco es una plaga silenciosa “que afecta al trigo y al maíz debajo de la superficie”.
“El productor se da cuenta cuando el daño ya está hecho, dado que va dañando las raíces. Es por eso que es importante un sistema de alerta para detectar y resolver antes el problema”, indicó.
Si bien señaló que no tiene mucha presencia en nuestra zona, “los asesores y productores no tienen que bajar la guardia”, concluyó Imwinkelried.
La capacitación se dividió en tres etapas:
La primera fue la exposición de la problemática de gusano blanco en los cultivos agrícolas y diferentes métodos para llegar al umbral de decisión en el control de los mismos.
La segunda parte fue un taller de reconocimiento de los diferentes gusanos blancos que se encuentran comúnmente en la provincia de Córdoba con material traído por los especialistas, donde se observaron las especies que son perjudiciales para los cultivos, diferenciándolas por sus características taxonómicas.
Finalmente, se realizó monitoreo a campo donde los participantes practicaron el muestreo en el mismo.
Los asistentes pudieron llevarse un buen conocimiento sobre la problemática del gusano blanco, la diferenciación entre especies, sus umbrales de daño económico y el tipo de monitoreo que se realiza a campo; siendo estos elementos herramientas importantes al momento de decidir.