Después de tomar una mejor distancia con respecto a sus seguidores, Rivadavia de Arroyo Cabral se apresta a recorrer los últimos metros del torneo Apertura que organiza la Liga Villamariense de fútbol, donde restan disputarse seis partidos.
El puntero invicto, que comenzó el certamen como principal candidato al título, supo lustrar ese cartel fecha tras fecha y ahora la pregunta de los aficionados al fútbol local es recurrente: ¿será inalcanzable?
Matemáticamente, la historia depara mucha tela para cortar, ya que el conjunto cabralense le lleva cuatro unidades a su archirival, Colón, siete a Atlético Ticino y ocho a Deportivo Argentino e Yrigoyen, a quienes todavía debe enfrentar.
En ese sentido, todo puede ser.
El caso es que Rivadavia apenas lleva perdidos dos partidos en el año, de los cuales ninguno se dio en el campeonato local.
En el torneo anterior, el "verde" llegó con posibilidades hasta las últimas fechas, pero eso no le alcanzó para dar la vuelta olímpica. Sin embargo, en el arranque de 2009, el regreso del entrenador Heraldo Pereno trajo aparejado el arribo de muchos jugadores con chapa en estas tierras. Y de ahí en más vino la participación en el torneo Provincial, donde el equipo quedó eliminado en cuartos de final, ante Matienzo de Monte Buey.
Lo concreto es que, pese a la eliminación, el "verde" quedó mejor perfilado que el resto, no sólo por la permanencia de muchas de sus figuras, sino porque mantuvo el ritmo de competencia y, en este tipo de torneos cortos, arrancó con cierta ventaja, tal como le sucedió a otros equipos locales que ingresaron en el campeonato que organiza la Federación Cordobesa de fútbol y luego ganaron o pelearon arriba en el torneo doméstico.

@ Puro gol

El potencial de Rivadavia se basa en las variantes que muestra su plantel, motivo por el cual no sintió las diferentes modificaciones que hubo dentro del propio grupo o del equipo, partido tras partido.
Un caso resonante es su promedio de gol a favor en todo el año: 2,93, casi tres goles por partido, una cifra de por sí alta.
Prácticamente, el mismo porcentaje tiene en los ocho partidos jugados en la Liga (2,87), pese a perder su goleador del Provincial, Martín Erregarena, quien marcó 9 goles de los 21 goles en el certamen de la FCF, donde el equipo tuvo un porcentaje de 2,62.
No obstante, ante la ida del "Vasco", el "verde" continuó contando con los goles de Gabriel "Poroto" Bolatti, quien lleva marcado seis goles en ocho partidos locales (diez en la temporada), al igual de la buena performance de Diego Ceballos. Otros de los valuartes de ofensiva es Andrés Agosto, quien actúa de delantero, por más que en los últimos partidos también contó con César Rodríguez (refuerzo para el torneo doméstico) y la presencia importante del "Puli" Berterame en el juego aéreo.
A todo esto, conserva en el banco a Claudio Crespo, uno de los goleadores del campeonato pasado.
Otro dato a tener en cuenta: en sólo tres de los 16 partidos que lleva jugados en la temporada, Rivadavia convirtió un solo gol, y en uno no anotó (en Monte Buey), mientras que su mayor goleada se la propinó a Alem en el debut del certamen local, por 7-1 en Plaza Ocampo, y le sigue el 6-1 que le anotó a Sportivo Sacanta en Arroyo Cabral, por el Provincial.

@ Triunfos

En materia de resultados, Rivadavia lleva ganados 11 partidos de los 16 que jugó en la temporada, 6 de los ocho partidos que jugó en el torneo Apertura, donde está invicto, ya que en los otros dos igualó, ambos de local, contra Yrigoyen y en el clásico, ambos sobre la hora.

@ En el debe

La deuda o el punto flojo del equipo de Pereno es que sufrió goles en la mayoría de los partidos, a excepción de dos, ambos en el torneo local, ya que no le anotaron en los triunfos por 1-0 ante Central Argentino (en barrio Mariano Moreno) y el 2-0 que consiguió en su última presentación, contra Alem.
Es más, en el Provincial le convirtieron 15 goles, una cifra alta teniendo en cuenta que le hicieron prácticamente dos por partido. Sin embargo, prácticamente la mitad de los mismos se los hizo un solo elenco, Matienzo, en la serie de cuartos de final, el cual fue triunfo del rival por 7-5.
Mientras, en el torneo local, el número de goles en contra baja considerablemente, debido a que -en igual cantidad de partidos- le marcaron siete goles, menos de uno por encuentro.
Tal vez los rivales se basen en estas estadísticas para acentuar con énfasis que Rivadavia puede tambalear en cualquier momento.
Por ahora, el paso arrollador en el certamen doméstico es propio de un futuro campeón. ¿Podrá alguien cortarle la inspiración?