“En una de las tantas jornadas de entrenamiento (kayak de travesía) por el Ctalamochita, disfrutando del entorno natural único en la región, otra vez nuestros ánimos se ven desmejorados por el quehacer inescrupuloso de ciertas personas, no podríamos llamarlos ‘vecinos’, ya que su accionar va en contra del bien común, se comportan como enemigos de sus conciudadanos”, dice el licenciado en Educación y docente Diego Villafañe.
“Es que no podemos entender qué pasa por sus cabezas al cumplir determinadas acciones, concretamente nos referimos al volcamiento de escombros y demás elementos de una relativamente antigua construcción”, dice el denunciante que a renglón seguido puntualiza: “Una edificación casi completa con hierros retorcidos ha sido arrojada intencionalmente al cauce del Ctalamochita desde la costa de Villa Nueva (justo enfrente de Playa Z, barrio Palermo de Villa María), desde precisamente el novel loteo Aguas Claras”.

@ Preguntas sin responder

Sobre el hecho puntual de los escombros arrojados, Villafañe consideró que surgen un sinnúmero de preguntas que es muy difícil responder: “¿Quién arrojó los escombros?, es evidente que fue hecho con maquinaria pesada. ¿Por qué lo hizo? ¿Cuál o cuáles fueron los criterios? ¿El operario recibió una orden de sus superiores, o tomó la decisión por su cuenta? ¿Qué piensan estos empresarios y operarios sobre el río, qué es una cinta transportadora que cumple la función de arrastrar y ocultar basura? ¿Saben que hay ciudadanos que disfrutan de las aguas del río? No entendemos qué puede pasar por las “cabezas” (razonamiento y afectos) de estas personas. Francamente se resiste a cualquier tipo de análisis mínimamente razonable” dijo el educador.
“Como usuarios y custodios aficionados permanentes del Ctalamochita, en los últimos años hemos observado con mucho agrado la intención de mejorar las riberas, cuidar un poco más el entorno y construir la planta de tratamiento de líquidos cloacales, entre otros anuncios”, destacó el entrevistado.
“Si bien la zona del Balneario Municipal se ha retocado vistosamente con pasarelas, zona de juegos para niños, lugares de esparcimiento, barandas (sólo en pocos sectores), bancos y parquizado especial para que los vecinos podamos disfrutar de la naturaleza, sería bueno que no sólo atendamos la estética del sector ‘céntrico’ sino que introduzcamos cambios efectivos que mejoren la calidad de las aguas y todo la costa”, resaltó para concluir el docente.
Esperemos que no sea demasiado tarde para revertir la situación.