Marcelo Loffreda, el ex técnico del histórico equipo de Los Pumas que logró el tercer puesto en el Mundial 2007 de rugby, estuvo presente ayer en la ciudad, donde previamente a disertar sobre “Liderazgo y Actitud” ante el público general, habló con los medios en una muy provechosa conferencia de prensa.
En la misma, más allá de las consultas sobre su reciente pasado en Los Pumas y los logros deportivos, Loffreda también destacó los valores humanos del deporte al cual representa, como así también la relación que puede haber para otros proyectos de vida.
Invitado por el ENINDER en el marco de su Ciclo de Conferencias, el entrenador, elegido como el mejor del mundo en el 2001, remarcó que el histórico “tercer puesto en el Mundial fue una utopía”, pero que a través del éxito deportivo “se pudo atraer más gente al rugby, ya que varios clubes aumentaron su cantidad de jugadores”.
No obstante, explicó que ahora dicho auge representa “un gran desafío, que es el de contenerlos” y que a los chicos “es fundamental transmitirles valores humanos, debido a que de esa manera vamos a ir generando que los jugadores sean líderes, primero de sí mismos y después de equipos o selecciones”.
Sobre a su presencia en la ciudad, el mismo comentó que “vengo a hablar desde el corazón, porque uno no estudió lo que va a decir, sino dar a conocer las experiencias vividas, ya que por más que a uno particularmente le ha tocado tener cargos de mayor responsabilidad, como dirigir el seleccionado argentino, básicamente soy una persona común”.
Ante la consulta de porque considera que empresas o entidades que no son deportivas busquen a líderes deportivos o cabeza de grupos de equipos, para informar sobre sus experiencias, Loffreda sostuvo que “es algo que me sorprende, pero también la sociedad está buscando referentes, fundamentalmente que se basen en los valores humanos, que es lo que promueve el deporte en general y el rugby en particular”.
En cuanto a la relación del deporte con la sociedad privada, el ex técnico del SIC y Leicester, entre otros, explicó: “Lo que ocurrió en el equipo de Los Pumas o lo que puede pasar en otros equipos, o deportes, es totalmente trasladable a una empresa. Por un lado, hay momentos para divertirse, pasarla bien, y hay otros en los cuales es necesario el trabajo, la preparación, la concentración, el estar muy atento a lo que se está haciendo o a estar determinados de tratar de lograr ciertos objetivos”.
“Por eso es tan significativo que uno o aquellos que hemos tenido un papel de colaboración con los equipos nos estén llamando desde las empresas, principalmente, como ‘Cachito’ Vigil o Magnano”, argumentó a continuación.

“El egoísmo es inaceptable”

En otro momento de la conferencia, Loffreda destacó que “el egoísmo es inaceptable en un equipo. La persona que es egoísta no es que sea inaceptable, sino que se transforma en inaceptable por el grupo y es rechazado”.
En cuanto a los factores a utilizar del deporte al cual representa por la sociedad, el “Tano” indicó que “el rugby es un deporte que debe ser aprovechada por toda la sociedad, porque si hay algo que creo que todos los argentinos deberíamos utilizar mucho más es el respeto, y en el rugby si no hay respeto no se puede jugar”.
En tanto, el director técnico habló sobre la actualidad de Los Pumas al comentar que “es un nuevo proceso que se está iniciando y que recién vamos a poder ver sus frutos en dos años, en el Mundial que viene o quizás en el otro”, mientras que también destacó las nuevas ideas implementadas por la Unión Argentina de Rugby.
En cuanto a las convivencias en un grupo de personas, manifestó que “siempre es difícil la convivencia. Cuando estás con mucha gente por mucho tiempo es natural que se den roces, debido a que uno mismo a veces estás de buen humor, otras que no, por lo que es necesario tener una persona que neutralice esas sensaciones y a veces vas a tener que ayudar a esa persona”.
“La convivencia entre seres humanos es compleja. Tenés un objetivo por lo que el vínculo y el sentido de pertenencia debe ser muy fuerte, para así generar ese compromiso que muchos vieron demostrado cuando los jugadores de Los Pumas cantaban el himno previo a un partido”, acotó luego.
Por último, resaltó el tercer tiempo del rugby: “Es algo inusual en otros deportes o atípico y el rugby lo sigue conservando. Si tengo que criticar algo del Mundial de Francia es que no hubo tercer tiempo, cuando los tests match o en la Liga de Inglaterra, que es toda profesional, se sigue respetando. El rugby es un deporte de contacto y debés enfrentar a un rival con la máxima agresividad física, pero después también este deporte te da la posibilidad que a ese jugador que jugó honestamente con vos, le vas a invitar un café, un té o una (y sólo una) cerveza”.