El juicio oral y privado que se le sigue al albañil Arturo Barrías ingresó ayer en la recta final, ya que pasado mañana se definirá con los alegatos de las partes y el dictado de la sentencia correspondiente.
En tanto, durante la audiencia de debate de la víspera comparecieron un trabajador de la construcción que conoce al acusado desde hace más de 20 años y una ginecobstetra forense que intervino en el segundo examen médico realizado a la supuesta víctima, luego de lo cual se dispuso un cuarto intermedio hasta el lunes a las 8.30 para la quinta y definitiva jornada de este intrincado proceso oral.
Los dos últimos testigos de la causa fueron el constructor local Ricardo Omar De Zárate y la médica cordobesa Lilián Beatriz Morán, quienes comparecieron ante el tribunal a puertas cerradas habida cuenta de que el hecho que se procura dilucidar es de instancia privada.
Como es de dominio público, Barrías, de 35 años de edad, está imputado como presunto autor de los delitos de “abuso sexual con acceso carnal calificado reiterado”, “violación de domicilio” y “desobediencia a la autoridad judicial”, y se encuentra detenido desde el 29 de mayo de 2008, cuatro días después de haber sido denunciado por la madre de una menor de 13 años, supuesta víctima de los bajos instintos del albañil.
Pese al carácter reservado de las audiencias, pudo saberse que De Zárate declaró conocer al acusado desde que tenía 14 años, cuando comenzó a trabajar con él en el mundo de la construcción.
El testigo, convocado por la defensa, definió a Barrías como un hombre “muy trabajador” y aportó otros detalles relacionados con su conducta personal.
Posteriormente compareció la médica que viajó desde la capital provincial para explicar algunos detalles del certificado que expidió, junto a su colega Raúl Boggio, el 18 de junio del año pasado, cuando la chica de 13 años fue examinada por segunda vez.
Morán ratificó aquel informe realizado en la ciudad de Córdoba, según el cual ambos facultativos establecieron que la menor no era virgen, algo que sí había determinado 17 días antes el por entonces médico forense villamariense Miguel Angel García.
Sobre el final de la audiencia, el camarista Héctor Fissore dispuso un cuarto intermedio hasta el lunes venidero, ocasión en la que se incorporará por lectura el resto de las pruebas documentales e instrumentales obrantes en el expediente como paso previo a los alegatos que pronunciarán el fiscal Francisco Márquez y la abogada craikense María Cristina Valles, defensora de Barrías.
Luego de que las partes expresen sus conclusiones, el tribunal le concederá al acusado lo que se conoce como “última palabra” y de inmediato pasará a deliberar para dictar sentencia.
El veredicto se estaría conociendo cerca del mediodía de dicha jornada.