Una de las hermanas de Arturo Barrías, quien está siendo juzgado por la Cámara del Crimen de Villa María, acusado de haber abusado sexualmente de una menor de 13 años, acercó a la Redacción de EL DIARIO una nota con pedido de publicación “antes que sea demasiado tarde”, explicó.
La misiva tiene carácter de carta abierta dirigida a la opinión pública y, obviamente, está relacionada con el proceso penal que se le sigue al trabajador de la construcción y que lo tiene privado de la libertad desde el 29 de mayo de 2008.
A continuación, se transcribe textualmente el manuscrito:

“Queridos lectores:
Me dirijo a ustedes con el fin de hacer reflexionar a todos aquellos que quieren hacer justicia; a aquellos que, día a día, luchan por la dignidad humana y, sobre todo, por los que luchan por la libertad.
No puedo dejar pasar más el tiempo sin expresar todo el dolor que siento al ver a un hombre inocente detrás de las rejas, luchando por querer obtener su libertad, una libertad que pocos merecen y que muchos tratan de hacérsela perder. Ese hombre es mi hermano.
Arturo fue acusado de abusar de una menor de 13 años por parte de la madre de la supuesta víctima, y eso no es verdad porque él crió a esa niña como si fuera su propia hija; daba la vida por esa criatura.
Es obvio que esa nena va a acusarlo, porque detrás de ella está su madre, que tortura a sus chicos llenándoles la cabeza en contra de mi hermano y que pelea por una casa que no le corresponde.
Si a una madre le abusan una hija, los bienes materiales no importan. No debe importar nada, solamente el honor de una hija.
Pero, en este caso, no es así. Esa mujer, acompañada de todos sus allegados, pelea y forma grupos con el fin de generar violencia y llamar la atención.
Es imposible creer que la Justicia no se dé cuenta de tanta farsa; que no se dé cuenta de que esa mujer está engañando a la Justicia con sus falsos testimonios, con sus ‘lágrimas de cocodrilo, que ensucia a una niña de 13 años contando aberraciones inventadas por ella misma y que juega con la reputación de mi hermano por el sólo hecho de obtener una casa.
Esa casa es de mi hermano, y ella pelea con uñas y dientes para no perderla. Hasta metió a sus padres para usurparla, porque si alguien va a inspeccionar esa vivienda, se va a dar cuenta de que quienes la ocupan no son los dueños.
Afirmo que mi hermano es inocente y doy mi palabra de fe de que es así. Hasta los propios médicos lo afirmaron, ya que no encontraron las pruebas del delito.
Lamentablemente, él se encuentra en esta difícil situación por confiar y compartir tantos años de su vida con esa mujer. Por eso hoy dice que estuvo 13 años ‘durmiendo con el enemigo.
Ruego que la Justicia sea justa y que no permita que cualquier mitómano declare en contra de una persona y que sus dichos se tomen como un testimonio verdadero.
¿Quién recupera a mi hermano de todo lo que tuvo que “aguantar” dentro de una celda siendo inocente? ¿Quién le devuelve su honor como padre?
Todo esto queda en manos de Dios Todopoderoso y de cómo actúe la Justicia.
Los saludo atentamente.”

I. B.
DNI 20662037