Escribe: Fernando de Goycoechea
En el encuentro disputado en el marco de la séptima fecha del campeonato organizado por la Unión Cordobesa de Rugby, San Martín cayó por 45 a 3 frente a La Tablada.
Para llevarse el triunfo final, los visitantes tuvieron una dura tarea. Los dueños de casa, con una sólida defensa, resistieron hasta los últimos quince minutos del encuentro.
Recién en el último tramo del juego, la escuadra cordobesa pudo expresar sus intenciones en el ingoal rival. Hasta ese momento, los puntos obtenidos por los “azulgranas” sólo llegaron por vía aérea.

s Todo esfuerzo

Habiéndose traído del clásico frente a Jockey Club la certeza de haber hecho el máximo esfuerzo, San Martín tenía ayer una difícil parada en su reducto de barrio Las Acacias.
Como visita, el siempre encumbrado La Tablada era un llamado a mantener la concentración constante y decisión para no ser superados por el oponente.
Con buena predisposición y una correcta defensa a los locales sólo les faltó, en la primera etapa, tener la lucidez necesaria para llevar la guinda al terreno de try cordobés.
Otro déficit (quizás el principal) fue no poder evitar la gran cantidad de penales cometidos, entregando así la oportunidad para que el efectivo Gastón Revol sumara con su pie de a tres.
Así y con un drop de Allasia y varios penales de Revol, el tanteador se fue animando mientras en el campo de juego las acciones se mantenían sumamente equilibradas.
Un minuto antes del cierre de la etapa inicial, y cuando el “Sanmar” se encontraba a escaso metros de la conquista, el wing visitante Caballero interceptó el balón y con una larga corrida que culminó en try estiró las cifras en el score.

Despierta y aplasta

En el segundo segmento, los “tricolores” siguieron dando lucha, pero ya sin el mismo ímpetu que durante el comienzo.
Cuando el reloj marcó veinticinco minutos de lucha intensa, el capitán de los “azulgranas” Federico Berhó marcó con su aterrizaje en el ingoal el rumbo definitivo del choque.
Minutos después los jugadores de Villa Warcalde seguirían los pasos de su líder. Debialorkursky, Cano y Cumella, apoyando la ovalada en territorio “tricolor” engrosaron la puntuación de la pizarra y sellaron el resultado.