Aceitera General Deheza es una de las 13 exportadoras de cereales que es investigada por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) a raíz de supuestos movimientos irregulares de fondos, se informó ayer.
La AFIP avanza en la investigación sobre 13 firmas cerealeras sospechadas de procedimientos irregulares por un monto que rondaría los 1.700 millones de dólares.
El monto en cuestión también será objeto de investigación por una comisión bicameral -consensuada por el oficialismo y la oposición- que analizará el comportamiento de las compañías sospechadas de elusión impositiva.
La conformación del cuerpo legislativo ya cuenta con media sanción del Senado y sólo resta la aprobación de Diputados para su puesta en funcionamiento.

Las sospechas

Una alta fuente de la AFIP informó ayer que la investigación del organismo recaudador será realizada en forma conjunta por la Dirección General Impositiva (DGI) y la Dirección General de Aduanas (DGA) para determinar si efectivamente se produjeron irregularidades en la presentación de las declaraciones juradas por exportaciones de las empresas investigadas, sin que hayan acreditado la tenencia de la mercadería.
“Estamos en la etapa de investigación y si bien hay unas 200 empresas involucradas, realizamos tareas de fiscalización en 13 firmas que representan más del 90% del universo a investigar”, indicó el informante, entre las que se encuentra la firma AGD.
Las empresas investigadas, exportadoras de aceites y oleaginosas, presentaron en noviembre del año pasado declaraciones juradas de exportaciones sin acreditar la tenencia o adquisición de dichos granos.
La maniobra de las cerealeras, que por un lado tributaban el 27,5% de derechos de exportación y simultáneamente le transportaban la carga de las nuevas retenciones a los pequeños productores, generó la creación de una Comisión Investigadora en el Senado de la Nación.
Se aseguró que existen “firmes sospechas” sobre las declaraciones juradas presentadas, mientras que la oposición hace hincapié en un presunto “tráfico de influencias y filtración de información sensible sobre las medidas económicas del Gobierno”.
Las empresas que tienen bajo la lupa los senadores, además de Aceitera General Deheza, son Cargill, Molinos Río de la Plata, Bunge Argentina y Louis Dreyfuss, entre otras.
“No es un objetivo nuestro perseguir a nadie”, sostuvo el senador Miguel Angel Pichetto, en alusión a la comisión que investigará estas presuntas irregularidades.