Un joven albañil que se encuentra internado en la Enfermería de la cárcel de barrio Belgrano se abstuvo ayer de declarar en relación a la causa por la que está procesado, al ser indagado por el fiscal Daniel Del Vö en su lugar de detención.
La inédita medida procesal duró poco más de media hora, ya que Sergio Leonardo Reynoso hizo uso del derecho constitucional que le asiste a todo imputado de abstenerse de declarar, sin que ello signifique presunción de culpabilidad.
De todos modos, el titular de la Fiscalía de Instrucción del Tercer Turno, acompañado por el secretario Walter Gesino y el abogado defensor Eduardo Luis Rodríguez, se dieron cita en el Establecimiento Penitenciario Nº 5, donde fueron recibidos por el subdirector.
Ya en el interior del penal, los funcionarios judiciales y el letrado que patrocina a Reynoso se dirigieron a la Enfermería, donde el joven procesado se encuentra alojado desde hace dos semanas a raíz de las graves lesiones que sufrió en un accidente de tránsito registrado el 7 de mayo último.
En aquel siniestro, ocurrido en la esquina de bulevar Alvear y Tucumán, el trabajador de la construcción resultó con triple fractura en el fémur de la pierna izquierdo y perdió la visión del ojo del mismo lado luego de colisionar la moto en que se conducía con un automóvil.
Reynoso fue auxiliado por los Bomberos Voluntarios, quienes lo trasladaron de urgencia al Hospital Pasteur, donde pocas horas después quedó detenido y con custodia policial, ya que pesaba sobre él una orden de captura dictada por el fiscal Del Vö.
Tal como lo anticipó EL DIARIO en su edición de la víspera, el joven albañil se encuentra procesado por la Justicia como presunto autor de "abuso sexual simple" en perjuicio de una menor, integrante de su entorno familiar.

Lo habían declarado rebelde

Si bien aquel delito es excarcelable, Reynoso tenía orden de detención porque no se había presentado a tres citaciones requeridas por Del Vö unos meses antes de accidentarse. Precisamente por esa situación se lo declaró en rebeldía.
La indagatoria de la víspera es un hecho sin precedentes en el ámbito judicial villamariense ya que nunca un funcionario había concurrido a la cárcel para interrogar a un procesado. Por el contrario, el Código Procesal Penal de la provincia establece que el imputado debe comparecer en la Fiscalía y no que el fiscal se traslade hasta su lugar de detención.
De todos modos, todo fue muy breve. Reynoso declaró sobre condiciones personales, pero (por consejo de su defensor) se abstuvo de comparecer en relación al hecho que se le atribuye. Así, el instructor de la causa, su secretario y el abogado se retiraron del penal apenas 35 minutos después de haber ingresado.
Reynoso deberá esperar ahora la resolución que adopte el fiscal Del Vö sobre su situación procesal. Mientras tanto, se repone lenta pero satisfactoriamente de las lesiones sufridas en aquel accidente.