Escribe: Juan José Coronell
Especial para EL DIARIO
“La linda del sur cordobés”, que se encuentra a siete kilómetros de Río Cuarto, tiene la fecha de su fundación en 1574 y con más de cuatro siglos de antigüedad fue testigo de la historia, cuando San Martín la utilizó como punto para reagrupar fuerzas para su campaña libertadora.
Podemos hablar también de una de sus edificaciones más antiguas, la iglesia “Nuestra Señora de la Merced”, que se construyó en el año 1770 pero se trasladó al lugar actual en 1830. Sus aspectos esenciales son la fachada y el campanario, que conservan su estilo colonial.
Esta historia a la que hacemos referencia se ve en sus calles estrechas, en sus casas y en los habitantes de este pueblo que crece a pesar de sus barrios dispersos, que son la postal de tantos años. Todo ello, sumado a la hospitalidad de los vecinos, hacen de Achiras un lugar ideal para disfrutar y gozar con un verdadero descanso. Además, el paisaje es imponente para que todo sea perfecto.
Aparte de descansar, el turista puede degustar los platos típicos, basados en cordero, ternero y vizcacha, como así también los dulces regionales.
¿Qué hacer?
Ideal para el cuerpo son las caminatas y cabalgatas por lugares que no siempre son visitados y la adrenalina que provoca el mountain bike. Además de estas típicas actividades serranas, Achiras nos permite encontrarnos con un sinfín de paisajes y lugares que no dejan de asombrar y de contarnos la historia.
El primero de ellos es el sitio de artes rupestres “El ojito” que consta de un alero pequeño ubicado al margen del balneario del pueblo y que cuenta con pinturas indígenas con varios diseños. Y ya que hablamos del río, para aquellos que quieran disfrutar del balneario “Río Achiras”, es muy bello con sus cascadas y cajones de piedra, además de los servicios indispensables.
También se puede conocer “El fuerte” cuya estructura estaba preparada para la defensa en contra de los aborígenes ranqueles, se convirtió en un verdadero fortín. Entre 1832 y 1869 se construyó en donde ahora se ubica la plaza. Esta fue la trinchera y estaba rodeada de militares, civiles y de la iglesia entre otros. También contaba con la Comandancia, donde hoy funciona el “Museo del Desierto”.
En el museo, la historia y la identidad del pueblo se pueden conocer pasando por las tres salas que lo conforman. Sus antepasados, los comechingones, el gaucho y las huellas que dejaron se hacen presentes en este lugar.
Ideal para vacaciones…
En estas vacaciones se llevará a cabo la “Gran Peña Vacaciones de Invierno”, ideal para llegar al lugar y allí disfrutar de Los Nogales. Este sitio se presenta como la primera posta de la localidad, que junto al recuerdo de los lugareños y el silencio que se disfruta en el momento de la visita, son ingredientes más que importantes para esta parte del viaje.
Y no hay que dejar de lado al cerro Inti Huasi. Si bien está en las afueras de Achiras, es un orgullo local, donde los aborígenes encontraron su residencia. Allí fueron dejando su legado: arte rupestre que no sufrió el paso del tiempo.
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