Belgrano no pudo llevar ayer al fútbol de Córdoba hasta primera división, aunque hizo el esfuerzo y empató 1 a 1 en Rosario con Central, que logró la permanencia sacando ventaja de la victoria obtenida como visitante el miércoles pasado por 1 a 0, sin evidenciar superioridad alguna sobre el equipo proveniente de la B Nacional.
Los “piratas” se pusieron en ventaja a los 37 minutos del primer tiempo por intermedio del volante Juan Carlos Maldonado e igualó 60 segundos más tarde el delantero Emilio Zelaya para los “auriazules”.
El desarrollo del primer tiempo encontró a ambos equipos aferrados a sus necesidades, con lo que el juego fue anodino y sin llegadas, ya que Rosario Central no quería arriesgar la ventaja obtenida en Córdoba y Belgrano no tenía recursos futbolísticos como para quebrar a su rival.
Por eso, en la media hora inicial, el juego se hizo monótono y la emotividad que decanta en este tipo de definiciones a todo o nada, en la que está en juego el año que pasó y también el que vendrá, no se hizo presente.
Con Ezequiel González en el banco, Rosario Central no tenía fútbol del medio hacia delante, más allá de los solitarios intentos por los dos costados del delantero Andrés Franzoia.
Por contrapartida, Belgrano, cuyo técnico sacó del equipo titular a Javier Lux para colocar en su lugar a un mediocampista más ofensivo como Franco Vázquez, no encontró en éste la cuota de juego imprescindible para acercarse al objetivo de marcar dos goles.
Sin embargo, cuando nada lo presagiaba, Belgrano se puso en ventaja luego de una serie de rebotes en el área local que derivaron en el pie izquierdo del volante visitante Juan Carlos Maldonado, que doblegó al arquero Jorge Broun con un potente remate desde la medialuna.
Pero poco le duró la alegría a los cordobeses, ya que apenas un minuto después y desde similar posición a la de Maldonado, un emblema de Central como Christian González, figura de la cancha, sacó un remate que devolvió el arquero Juan Carlos Olave, pero el rebote le cayó a Emilio Zelaya, que anotó de derecha.
El primer tiempo se extinguió entonces tal como había empezado 45 minutos antes, con ambos equipo sumergidos en las mismas necesidades.
Y en el complemento no hubo cambios sustanciales en el desarrollo, más allá de que durante varios pasajes el local se metió demasiado atrás, como temeroso de que la historia del partido pudiera jugarle una mala pasada.
Y esto, ante las limitaciones observadas por Belgrano, un equipo que terminó cuarto en el campeonato de la Primera B Nacional, no resultó muy alentador para sus 36.000 hinchas, que al final pudieron festejar, pero se fueron preocupados por lo que vendrá.
Es que Gimnasia, que previamente se salvó del descenso milagrosamente al vencer a Atlético de Rafaela (ver página 19), iniciará la temporada 2009-2010 diez puntos por encima de los rosarinos en la tabla de promedios, con lo que el sufrimiento se prolongará a todo ese período.
Y la similitud entre “triperos” y “canallas” respondió además que para salvarse del descenso, sus conducciones apostaron a la repatriación de jugadores referentes de ambas instituciones, lo que en el caso de Central tuvo como nombres propios al mencionado “Kily” González, su homónimo “Equi” Ezequiel e Iván Moreno y Fabianesi.
En tanto, Belgrano deberá conformarse con continuar otra temporada en la B Nacional después de perder otra Promoción, tal como aconteciera el año anterior para esta misma época ante otra “Academia”, en aquel caso la de Avellaneda, Racing Club.
“Vamos a ganar en Rosario y ascender”, había dicho el experimentado arquero de Belgrano, Juan Carlos Olave, de buena tarea ayer, pero que volvió a sufrir con otra frustración del equipo del que es hincha y también máximo referente. Es que la primera no tiene lugar para todos. Y Córdoba sigue sin disfrutarla.