Hoy se cumplen 13 años del día en que desapareció el niño villamariense Gonzalo Ledesma. Tenía once años. Desde muy pequeño supo que tenía que enfrentarse a la vida, cargando mercaderías a quienes compraban en un supermercado, una forma de sumar dinero al humilde y carenciado hogar familiar, constituido por siete hermanos.
Como Maximiliano Rodríguez un año antes, Gonzalo Ledesma tuvo un horrendo final. A ambos los violaron y sus cuerpos aparecieron flotando en las aguas del Ctalamochita.
Para eso, hubo que pasar angustiosos y tremendos días.
Los dos chicos desaparecieron en julio y fueron encontrados en agosto. Maxi, en 1995. Gonzalo, un año después.
La Justicia villamariense, por ese entonces representada por hombres que hoy no están en el Palacio tribunalicio, no logró llevar entre rejas a nadie por el crimen de los dos niños, que nunca supieron de justicia. Ni en sus vidas, ni en sus muertes.
La Asociación Civil Verdad Real y Justicia para Todos, entidad presidida por Mary Amaya que reúne a familiares de víctimas de crímenes impunes o muertes dudosas, recordó a los pequeños y llamó a la sociedad a participar en la búsqueda de justicia, aportando los datos que se estimen convenientes.
Otras notas de la seccion Policiales/Judiciales
Tres personas heridas de gravedad
Robo en un comercio
Operaron a Maximiliano y continúa en terapia
Incautan arma de fuego y recuperan herramientas
Dos nuevos testigos en un proceso por abuso sexual
|