Escribe:
Daniel Parodi

Los últimos seis años han convertido al sector de Tecnologías de la Información (IT) en uno de los que más creció en volumen, cantidad y calidad de negocios.
No obstante, la situación lo ha puesto ante una crisis sin precedentes por la ausencia de recursos humanos calificados para asumir las tareas de desarrollo.
El desafío pasa por mejorar los perfiles de los egresados de carreras informáticas y alentar el ingreso de alumnos a las mismas.
Un breve contacto con las empresas informáticas locales pone en evidencia que todas, grandes, medianas y pequeñas, tienen un problema en común: las complicaciones para encontrar Recursos Humanos con formación y perfiles útiles a sus necesidades.
La situación no es nueva, pero sí lo es el marco en que se desempeñan estas empresas: gran desarrollo, crecimiento y nuevas necesidades en un lapso corto de tiempo.
La situación implica urgencia en cuanto a contratación de nuevos recursos, que sean capaces de encarar los nuevos desarrollos que los clientes de las IT solicitan.
Es decir, conocimiento de nuevas tecnologías, aplicaciones, rapidez de asimilación de nuevos escenarios.
La crisis se profundizó con la llegada de compañías internacionales, sobre todo a Córdoba. Y los datos principales a nivel nacional indican que el 60% de los estudiantes de Informática deja en primer año y 10 mil es la brecha entre demanda y oferta de RR.HH.

El desafío y la intervención del Estado

Para los empresarios locales del sector, existe una brecha grande entre lo que los alumnos pueden hacer al egresar y los conocimientos que el mercado demanda a las empresas para seguir en carrera.
Por otro lado, existe cada vez más demanda de empleos, pero decrece la matrícula de egresados.
Por supuesto, es entendible que los tiempos de las unidades académicas no pueden seguir el vertiginoso ritmo de crecimiento del mercado.
Sin embargo, es importante que comience una tarea conjunta de los protagonistas de este sector, a efectos de “aggiornarse” en forma mutua y llegar a consensuar los métodos adecuados para afrontar los tiempos actuales.
Pero esa acción no puede excluir al Estado.
El Estado debe, necesariamente, actuar como nexo entre el sector privado, las unidades académicas y el sector público, a efectos de colaborar con su estructura en pos del mejoramiento general.
Se trata de empleos generalmente muy bien remunerados que benefician a la sociedad en su conjunto, máxime a las sociedades pequeñas y medianas donde el impacto del empleo es fuerte.
Actualmente, las empresas de Villa María y la región toman nuevos recursos que, en su mayoría, no han culminado sus estudios.
También se toman egresados de los distintos medios educativos, pero las expectativas no se satisfacen.
La situación lleva a que cada empresa deba capacitar a cada empleados entre seis y doce meses para convertirlo en productivo.
Con todo, tampoco se satisface la demanda de empleo que el sector tiene.

Cifras claras

El sector creció, sólo en 2007, el 20% respecto de 2006, mientras que las estimaciones para el corriente año, ubican ese crecimiento en un 25% respecto de 2007.
Según la Cámara Argentina de Empresas Informáticas y Telecomunicaciones de Argentina (Cicomra) y la consultora Prince & Cooke y Asociados, indicaron meses atrás que 160 mil personas trabajan en empresas de informática y comunicaciones.
Si se suman otros sectores públicos y privados, que utilizan también esta clase de herramientas, el número asciende a 310 mil (alrededor del 2% de la población económicamente activa del país).
En 2006 el número fue de 28.600 personas en el mercado de informática y comunicaciones, con 19.100 en Telecomunicaciones y 9.500 en IT. Para 2009 el sector demandará 370 mil personas, de las que 20 mil no estarán entrenadas o capacitadas adecuadamente.

La realidad cordobesa en el ámbito tecnológico-informático

Desde el Clúster Córdoba Techonolgy (CCT), entidad provincial gremial empresaria del sector, explicaron que el principal inconveniente para el sector TI se centra en que el número de alumnos y particularmente de graduados de las carreras formales en cuestión no ha permitido cubrir las necesidades de la demanda, a pesar de haber evolucionado favorablemente en los últimos años.
Además, la dificultad en captar personal especializado se ve agravada por la volatilidad y la rotación del personal en el sector, que en algunas empresas alcanza al rango de 30% a 35%.
“La Educación Superior no ha podido acompañar el crecimiento de la demanda de recursos humanos de la industria, no sólo en cantidad de profesionales formados sino también en las orientaciones formativas de dichos profesionales.
Y si bien, se están realizando esfuerzos conjuntos entre el sector privado y las universidades para salvar estas distancias, hoy los jóvenes egresados muestran un gap de entre 3 y 6 meses de capacitación para poder insertarse productivamente en las empresas”, apuntaron.
Se estima que en los próximos años, la demanda de capital humano en Argentina excederá a la oferta en 21 mil personas con perfiles críticos en áreas IT; en tanto, hoy en Córdoba se calcula que estarían faltando entre mil y 1.500 profesionales.
“La radicación de multinacionales en Córdoba ha acentuado la brecha existente entre oferta y demanda de capital humano, y ha influenciado en la suba significativa de salarios; salarios con los cuales las empresas locales no pueden competir”, finalizaron expresando los consultados.