El lunes cerca de la medianoche dejó de existir Luis Vancauteren, un hombre del deporte, del karate, de la enseñanza.
El deceso se produjo a las 23.30, cuando el corazón del profesor dejó de latir y el pesar cayó en toda la localidad como un duro golpe. Ayer, antes del sepelio, un importante número de vecinos, alumnos y amigos acompañaron sus restos para recibir en su adiós un homenaje frente a la Municipalidad de Ballesteros. Es que además, Vancauteren participaba de la vida política de su sociedad y había asumido en 2007 como concejal por el oficialismo (Unión por Córdoba).
Vancauteren , de 54 años, se desempeñaba como profesor de esa disciplina que lo llevó a viajar por todo el país y a veces en el exterior para hacer participar a sus alumnos de los denominados "Mundialitos". Dirigía su escuela Asociación de Karate Internacional Shotokan (con sede en el club Gimnasia de Ballesteros), con la autoridad de cinturón negro, 5º Dan.
Sus pares destacan de ello la conducta que mostraban sus educandos, lo que trascendía más allá de la competencia.
Lucas Trucco, profesor de karate y ex alumno, dijo a EL DIARIO que Vancauteren "es y será una referencia del karate en una amplia región", y que se lo debe destacar "por la persona".
El colega Sergio Linch, por su parte, manifestó al ser consultado por este matutino, que: "Me puso muy triste la noticia", y se expresó "sorprendido por los sucedido".
El artista marcial del kung fu y karateca, Hugo Vílchez, subrayó de Vancauteren que con sus alumnos "participaba mucho de los torneos abiertos, nunca se fijaba quién los organizaba, lo que habla a las claras de su amplitud". Dijo además "que era una gran pérdida" la muerte de Vancauteren.