Una conocida familia de la localidad de Etruria fue asaltada ayer a la madrugada en su domicilio particular, donde el dueño de casa, su esposa y dos hijos se encontraban durmiendo.
Se trata del productor agropecuario Mario Morandi, su mujer, Norma Isabettini y sus hijos Maico de 15 años y Maia de 17, alrededor de las 2.30 fueron sorprendidos por cuatro delincuentes en su domicilio de la calle Ballestrini 320 de la mencionada población.
La banda, compuesta por tres hombres y una mujer, actuó a cara descubierta, por lo que no costó a las víctimas deducir que no eran delincuentes locales ni de la zona cercana, ya que no reconocieron a ninguno.
Uno de los cacos iba armado. Ingresaron a la morada por una puerta ubicada en la parte posterior del edificio, sin ejercer ningún tipo de violencia en las aberturas, motivo por el cual los investigadores policiales suponen que pueden haber accedido utilizando una ganzúa o bien que alguien les haya provisto de una llave gemela, aunque esto parece menos probable. Tampoco se descarta que los moradores hayan olvidado de cerrar con llave.
Los Morandi fueron maniatados y amordazados, aunque no golpeados, según pudo conocerse.
Dato erróneo
y magro botín
Por como se desarrollaron los acontecimientos dentro de la casa de las víctimas y algunos trascendidos, los delincuentes llegaron a la casa de la calle Ballestrini con un dato erróneo.
Los asaltantes exigían a Morandi una importante suma de dinero, supuestamente producto de la venta de cereales o leche, ya que el hombre tiene tambo y también se dedica a la agricultura. Pero el productor no había concretado ninguna operación, de modo que no tenía el monto demandado.
Los delincuentes revolvieron toda la casa, pero no encontraron más que una suma distinta de la que habían ido a buscar. No obstante, se llevaron entre 1.000 y 3.000 pesos, hay distintas versiones, tres teléfonos celulares, una cámara digital, algunas alhajas y una importante cantidad de ropa de mujer, de muy buena calidad y en algunos casos de marcas reconocidas, parte del stock de la tienda de ropa femenina que la dueña de casa posee y está ubicada justo al lado de la casa de familia.
Según la Policía, los delincuentes se dieron a la fuga de a pie, aunque es posible que los haya estado esperando algún cómplice en un vehículo en las cercanías de la casa.
La denuncia fue formulada poco después de las 4, cuando los Morandi lograron zafar de las ataduras.
La investigación de lo ocurrido quedó en manos del fiscal de Instrucción del Segundo Turno de los Tribunales villamarienses, Gustavo Atienza.
Roban un auto en Villa Nueva
Por otra parte, ayer a las 12, Mario Videla, de 44 años, denunció en la Comisaría villanovense que los amigos de lo ajeno le habían sustraído su Fiat 147 blanco, patente RUG 198.
El hecho ocurrió en la calle Marcos Juárez al 100, en la vía pública.
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