Definir las zonas de exclusión para agroquímicos es uno de los puntos que tratará la nueva ordenanza sobre agroquímicos.
Si bien hay una ley provincial que establece claramente que en zona urbana no se puede utilizar herbicidas como el glifosato, en muchas ciudades, además de adherir a la ley, se hacen normas específicas para tratar de abarcar también los productos utilizados en frutas y verduras que se transportan por el sector poblado.
El Diario consultó con Luis Tuninetti, director de Eco Sitio, para conocer los avances de la normativa.
“Están discutiendo el tema, escuchando opiniones y la nuestra fue que se hace absolutamente necesaria la implementación de una zona de resguardo ambiental para las pulverizaciones de agroquímicos”, dijo. Agregó que en los últimos tiempos receptaron muchas denuncias al respecto, por lo que “es claro la preocupación y está extendida en la ciudad”.
Además, la ordenanza preve que quienes ingresen verduras y hortalizas deberán cumplir tres condiciones: declaración jurada de que conocen la legislación vigente, presentación obligatoria de la receta fitosanitaria y asesoramiento profesional fitosanitario. En este punto, Tuninetti, se refirió al caso de Córdoba capital: “Allí se encontraron agroquímicos en exceso en las verduras, e incluso algunos prohibidos, por lo que está actuando la Justicia y actualmente hay productores y funcionarios imputados”.
“Cuando hablamos de problemas con los agroquímicos, hablamos de mal manejo de sustancias tóxicas que afectan la salud de las personas. No puede anteponerse la ganancia del productor, por sobre el bienestar común”, expresó Tuninetti.
“Recibimos denuncias en las cuales se fumigaba con viento, la ropa tendida en los patios de las casas lindantes al campo era impregnada por los agroquímicos, cosa que resulta inadmisible desde el punto de vista del cuidado de la salud”, agregó.
Según Eco Sitio, una zona en la cual se prohiba todo tipo de sustancia química en la producción es la mejor forma de prevención de contaminantes que están directamente relacionados con el cáncer, leucemia, enfermedades de piel, por citar los más importantes. La entidad ambientalista considera que es mucho más fácil controlar que no se fumigue, antes que verificar que se cumplan todas las variables necesarias para la correcta aplicación.
“Las variables que se deben tener en cuenta a la hora de la aplicación son tantas que dificulta reducir el impacto de los agrotóxicos”, dijo.
Algunos de los problemas presentados, según Eco Sitio, son:
- Agroquímicos aplicados sin una comprensión real de su peligrosidad.
- Aplicación de manera rápida.
- Aplicación aún en condiciones climatológicas adversas o no recomendadas para la aplicación.
- Mezcla de productos o incorrecta dilución.
- Aplicación con presencia de personas en las cercanías, o usando a personas para señalar los lugares (banderilleros).
- Venta de productos fraccionados.
- Falta total o parcial de equipos protectores.
- Inexistencia de capacitación.
Finalmente, Tuninetti, expresó que “posiblemente sea el proyecto de ordenanza más importante que se haya presentado en referencia a la prevención de la salud en la ciudad en lo ambiental”.