Una familia del barrio San Nicolás denunció a los agentes que prestan servicios en la Dirección de Tránsito municipal por “haberse quedado” con herramientas guardadas en un vehículo secuestrado.
Los elementos (una pulseana y un destornillador), según indicó Teresa Saldaño estaban bajo el asiento de una moto que fue retenida, días atrás, en un control vehicular.
“A mi hijo le quitaron la moto porque no andaba en regla, pero no es cuestión que por eso le roben sus herramientas de trabajo”, indicó la mujer.
Cabe señalar que Teresa, al descubrir la vergonzosa situación y dar cuenta de lo sucedido recibió una insólita respuesta.
“Me crucé hasta la Municipalidad para hablar con el jefe que maneja todo y que atiende en la oficina 211. Después de esperarlo por más de dos horas, le comentamos a la secretaria nuestro problema y preguntamos quién se haría cargo de las cosas que faltaban”, relató Saldaño que tuvo que esperar hasta el día siguiente para encontrarse con la autoridad de la dependencia comunal.
“Al comentarle lo sucedido el jefe de Tránsito se hizo cargo y compró las herramientas”, destacó con asombro la denunciante.
“Cuando me trajeron las herramientas, nos dimos cuenta que eran distintas a las que nos robaron. Estas eran de menor calidad y distinta medida que las nuestras”, enfatizó la consultada por EL DIARIO.
“Imagínese que si en menos de 24 horas me robaron esto, lo que hubiera pasado en una semana... seguro que le iba a faltar todo”, agregó la vecina.
“Como ellos reclaman la multa yo también quiero que me devuelvan lo que es mío. Así como me pasó a mí le puede pasar a cualquier ciudadano”, concluyó la entrevistada por este matutino.