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1 de Septiembre de 2009
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Sinceramente, una vergüenza
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Señor director:
El día miércoles 19 de agosto fui testigo de dos hechos vergonzosos, ambos vinculados a líneas de colectivos: 104 Universitaria y 16 Urbana. El primero de ellos sucedió en horas de la tarde.
Por empezar, todos los ciudadanos de Villa María -creo yo- estamos contentos y/o conformes por el crecimiento que ha tenido la Universidad Nacional en estos últimos años. Se sabe que en este año las inscripciones superaron expectativas subiendo un alto porcentaje de estudiantes.
Ahora bien, es inconcebible que únicamente esté funcionando un colectivo de la línea 104, sabiendo que éste es el preferido de los alumnos para llegar a la institución.
Tan es así, que durante el día al que hago referencia, dentro del colectivo éramos aproximadamente 60 personas, todos amontonados, hacinados. Parecíamos animales o cualquier cosa menos estudiantes de la UNVM.
Como si eso fuera poco tuvimos que aguantar el humor del colectivero, que en realidad era el único que podía reírse en esa situación.
“¡Vamos, vamos, para atrás, amontónense que tienen que entrar 250!”, repetía una y otra vez el chofer, de no muy buena manera, cada vez que se detenía en una parada.
Cabe señalar que la línea 104 hace su primera parada en la Terminal de ómnibus. Allí se llenaron todos los asientos y muchas chicas y chicos tuvieron que viajar parados en el pasillo.
Desde la Terminal hasta la Universidad son unas siete u ocho paradas más. Ese día subió todo el que pudo hacerlo, hasta por la puerta trasera.
El ruido del motor manifestaba lo cargado que iba el colectivo. La gente que nos cruzaba en la calle se asombraba al ver pasar el vehículo.
Gracias a Dios llegamos vivos (en una de las calles de tierra, cerca de la UNVM, el micro estuvo a punto de volcar) y nadie se descompuso (o por lo menos no me enteré…¡Era imposible!).
Soy estudiante de la Universidad, soy de Villa María, me cansé de quejarme y no hacer nada, por eso el motivo de esta nota. No soy la única que piensa de esta manera: escucho diariamente sobre las molestias y disconformidades de los estudiantes por dicha cuestión.
Espero que esto se solucione porque no voy a dejar de insistir hasta que, los que pueden, hagan lo que tienen que hacer. Conservo el boleto del día que, por suerte, tiene todos los datos que necesito.
Siguiendo con el asunto, el mismo día esperaba en el Centro de Transferencia la línea 16 de las 20.20. El colectivo allí parado esperando que sea la hora de seguir y comenzar el recorrido (ya que había llegado más temprano). Dentro del coche, había gente que venía con la línea, en tanto yo esperaba el regreso del chofer para poder subir.
Eran las 20.20 y el conductor no llegaba. Cuando vuelve (a las 20.28) un pasajero manifestó su desagrado por la demora. El colectivero, inmediatamente, contestó de muy mala manera, levantando la voz delante de toda la gente que permanecía en el autobús, aún sabiendo que verdaderamente había llegado tarde.
Ocho minutos de atraso es mucho, en realidad esa es la hora que marca mi boleto, pero como el colectivero siguió la discusión y esperó que subiera una señora, se terminaron completando diez minutos de demora.
De este modo el retraso se transforma en un montón de tiempo. Exactamente la mitad del recorrido que hace la línea (he controlado con reloj el circuito que hace el colectivo).
Ciertamente es una falta de respeto a los usuarios, ya sea de líneas urbanas o universitarias.
Que los choferes no olviden que si nosotros no usáramos el servicio que ellos brindan, no tendrían trabajo. Tampoco olviden que trasladan a personas y no a animales.
Para agregar al caso: es una burla lo que hacen (a veces) con la línea universitaria 105. Sabiendo que es la segunda más elegida por los estudiantes, y que la probabilidad de que se llene es muy grande, ponen a disposición uno de los colectivos más pequeños que tiene la empresa.
Yo no sé quién es el encargado de designar el número de coche al número de línea, pero de lo que puedo darme cuenta es que no tiene nada de estratégico y el sentido común no lo desarrolla. ¡Es una burla!
Los colectivos ¿están asegurados?
¿Qué opinan los inspectores respecto al amontonamiento de pasajeros?
¿Cuál es la cantidad de personas que está permitida?
Si llegara a pasar algo ¿Quién se hará responsable?
¡Por favor, tomen medidas!

Flavia Cipolat
DNI 35637809

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