La Cámara del Crimen de Villa María condenó a un fletero oriundo de Cruz del Eje que el 29 de noviembre del año pasado protagonizó una serie de delitos y alarmó a los vecinos de toda una manzana de barrio Centro Sur.
Se trata de Rolando Javier Silva, quien recibió una pena de un año y medio de prisión de cumplimiento efectivo, con declaración de reincidencia, tras confesar su responsabilidad penal en los hechos que se le atribuían.
Esta circunstancia posibilitó que el juicio fuera de trámite abreviado, con lo cual se omitió la recepción de pruebas testimoniales en la sala de audiencias ubicada en el quinto piso de los Tribunales locales.
Varios delitos
Silva fue declarado autor de los delitos de “violación de domicilio reiterado” (dos hechos), “daño reiterado” (tres hechos), “lesiones leves dolosas reiteradas” (tres hechos), “resistencia a la autoridad reiterada” (dos hechos), “portación ilegal de arma de fuego de uso civil” y “encubrimiento”.
Todos los ilícitos los cometió poco antes de la medianoche del 29 de noviembre del año pasado, cuando intentó cometer un robo en una vivienda situada en calle San Luis al 400, pero su sospechosa presencia en el techo de la finca fue advertido por un vecino que pasaba por allí.
Alertada la Policía, arribaron a ese sector de la ciudad tres móviles del Comando de Acción Preventiva, cuyos efectivos rodearon la manzana conformada por bulevar Cárcano y las calles Rivadavia, San Luis y Tucumán, ante la mirada de numerosos vecinos de la zona.
Todo empezó...
La búsqueda del desconocido se inició exactamente en San Luis 449, cuando al caminar por los techos accionó la alarma instalada en la vivienda allí ubicada, propiedad de Omar Coutsiers. Posteriormente golpeó al dueño de la casa y escapó por los techos, para continuar su huida por el vecindario.
Silva fue arrestado momentos más, no sin antes resistirse denodadamente al accionar policial (golpeó a un uniformado), en el predio que ocupaba la ex Escuela de “Bellas Artes”, en bulevar Cárcano y avenida Dante Alighieri.
Al ser detenido, en poder del delincuente la Policía secuestró un revólver Bagual, calibre 22, con la numeración limada, además de cinco cartuchos con punta hueca y una cédula de identificación de un automóvil Peugeot 206, perteneciente a una mujer radicada en la capital provincial.
Antecedentes
Silva, domiciliado en barrio Quintas de Argüello, en la periferia de la ciudad de Córdoba, tiene antecedentes penales, ya que fue condenado en dos oportunidades por la Justicia cordobesa: la primera vez recibió una condena de cinco años de prisión por un robo y luego una de un año y dos meses por otros delitos contra la propiedad.
Sin embargo, ambas sentencias ya fueron cumplidas en su totalidad, motivo por el cual no se unificaron con la que le impuso ahora la Cámara del Crimen de Villa María.
Juez y partes
El juicio fue presidido por el camarista René Gandarillas y contó con la participación del fiscal Francisco Márquez y el abogado defensor Marcelo Martín Silvano, mientras que la secretaria actuante fue Gabriela Sanz.
Por tratarse de un presidiario reincidente, Silva no podrá obtener el beneficio de la “libertad condicional”, pero sí tendrá acceso al instituto legal conocido como “libertad asistida”, que permite el egreso seis meses antes del cumplimiento total de la pena impuesta.
Así, estará en condiciones legales de dejar el penal de barrio Belgrano el próximo 29 de noviembre, precisamente cuando cumpla un año de prisión.
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