-¿Satisfechos?
-Satisfechos por contar con la presencia de las mejores cabañas argentinas, presentando el récord de ejemplares expuestos en Holando, con magníficas Jersey, todas en galpones, más casi setecientos animales a corral. Superamos los mil animales y es un logro.

-¿Y en los aspectos comercial e industrial?
-Si bien este año coincidió con la AgroActiva, se tuvo buena respuesta de los sectores involucrados con la lechería y se vendieron (ocuparon) todos los stand ofrecidos en la muestra.

-¿Qué saldo dejaron las charlas técnicas?
-Los disertantes seleccionados para esta MIL han comprobado el interés de los productores en escuchar los nuevos conceptos en manejo, alimentación, conservación del suelo y de forrajes, en todo lo que hace a la producción lechera.

-¿Cómo funcionó el jurado?
-Estamos orgullosos del jurado, ya que además de ser un excelente productor lechero y jurado reconocido internacionalmente y recientemente seleccionado como jurado para la muestra lechera más grande del mundo, como es la Madisson. Además de su presencia, hay otros hechos que confirman que las apuestas que hicimos fueron acertadas, como la coronación con espectáculos y, por primera vez en la Argentina, la jura finaliza con una cena show donde reconocidas modelos de nuestro país, dirigidas por Teté Coustarot y el modisto Di Doménico, desfilarán entre los animales, en el cierre de la jura, en la elección de hembras en lactancia hasta elegir la mejor hembra, que es el premio mayor de la MIL, todo en una carpa gigante. Es una innovación en muestras ganaderas en nuestro país, que también sirve para demostrarle al mundo que estamos en la cuenca lechera más importante de América latina, donde se ordeña en más de 1.800 tambos de la región con alrededor de 300 mil vacas en tambo x día, y lo más importante: más de 70 mil puestos de trabajo, ya que creemos que un país se hace grande generando no sólo dinero, sino trabajo genuino. Es el trabajo genuino lo que nos dará la posibilidad de despegar como país en serio.

-¿Qué hay de los cambios que parecen venir en el sector, como el confinamiento?
-El mundo va hacia el confinamiento del ganado lechero, por el valor de las tierras, el avance de la agricultura. El productor debe aprender a producir más leche en menos espacio, por lo que el tipo de vaca a criar de aquí en más, cambia profundamente. Hoy se le da mayor importancia a la fertilidad de la vaca, a la vida útil, a la facilidad de parto, a todo lo funcional para que la vaca viva más años. Para amortizar los costos, es necesario mayor longevidad y mayor producción, vacas modernas y, además, adaptarlas a vivir en espacios reducidos.
Estamos convencidos de que el futuro de la lechería es excelente. Sabemos que estamos viviendo un momento difícil, que pasará, porque el mundo necesita leche. Hay mayor demanda de buenos alimentos y la leche es un alimento base fundamental para la buena nutrición humana. Apostamos a que la Humanidad tienda a invertir menos en guerras y más en comida de calidad. La lechería no sólo tiene un gran espacio, sino grandes posibilidades de crecer, el mundo tiene necesidad de incorporar vientres para aumentar su producción, y nosotros tenemos para vender las mejores vacas, que no serán suficientes si no se incrementa la cría, para abastecer del vital alimento que es la leche.