Cuando los inspectores de la Administración Municipal de Ingresos Públicos (AMIP) salgan a la calle esta semana, los conductores tendrán que ajustarse el cinturón de seguridad y prepararse para ser “marcados” con un sello verde o rojo.
A partir de mañana, el municipio retomará los operativos tendientes, de acuerdo a sus palabras, a “brindar información a contribuyentes de la ciudad.”
No hace falta ser un experto en la materia para darse cuenta que la idea es mejorar la recaudación y para ello han ideado un plan que tiene una pequeña cuota de escrache en su esencia.
Los inspectores para cumplir la misión, llevarán en su poder stickers no aptos para daltónicos. Los adhesivos de color rojo y verde será la marca que dejarán en el vehículo que pase por la verificación de la Secretaría de Economía y Finanzas.
Los que rindan bien el examen y no tengan deudas sobre la contribución de los rodados llevarán el premio del sticker verde (color esperanza) en sus cristales.
En cambio, los morosos, aquellos que se han demorado en el pago de sus contribuciones, lucirán en sus parabrisas el color rojo del fuego, la pasión y el peligro.
“Es pertinente señalar que la implementación de dicha modalidad en estos operativos tiene el principal objetivo de agilizar el trabajo de los inspectores y provocar menores molestias a los vecinos”, precisó un comunicado oficial.
Por otra parte, el Gobierno local remarcó, en este sentido, que “previo a la realización de estos operativos, se llevó a cabo un exhaustivo relevamiento a fin conocer la situación particular de cada uno de los vecinos”.

Controles

En otro orden, el fin de semana se realizaron los tradicionales operativos de tránsito y de control de alcoholemia.
Los agentes inspeccionaron 134 automóviles, motocicletas, remises y taxis en la intersección de los bulevares España y Vélez Sarsfield y labraron seis actas por incumplimiento de alguno de los requisitos solicitados.
Los conductores de dichos rodados tuvieron que pasar por el test del alcohol.
En siete casos, el resultado fue positivo. Seis de las personas que tomaron una copita de más fueron demorados, de acuerdo a la información municipal.