Las denuncias por casos de violencia familiar aumentan a un ritmo del 7% anual en Córdoba, según revela un informe que fue dado a conocer ayer desde el Tribunal Superior de Justicia de la provincia.
El estudio, que la máxima instancia judicial provincial encargó al área de Investigaciones del Centro de Perfeccionamiento “Ricardo C. Núñez”, detalla que los índices más elevados se registran en los distritos de Cosquín, Santa María de Punilla y Jesús María.
El trabajo concluye que desde 2006 a 2008 las denuncias por violencia familiar admitidas por los organismos competentes del Estado se incrementaron un 21%.
Según detalla el informe, en 2006 se admitieron 13.822 denuncias en los tribunales provinciales; en 2007, 14.302, y en 2008 la cifra trepó a 16.676, arrojando un incremento anual del 7% y un promedio de seis denuncias por cada mil habitantes.
Cosquín encabeza el listado de localidades con mayor índice de denuncias (20/1.000), seguida por Santa María de Punilla (17/1.000), Jesús María (16/1.000) y Malagueño (13/1.000), en tanto en la ciudad de Córdoba se registran ocho denuncias cada mil habitantes, dos más que el promedio provincial.
El informe precisa que entre los tipos de medidas solicitadas por los denunciantes ante los tribunales competentes en materia de violencia judicial, las más recurrentes fueron “prohibir, restringir o limitar la presencia del agresor” (29,5%) y “prohibir la comunicación y relación con la víctima” (27,7%).