Un carpintero domiciliado en Villa María recibió ayer una condena unificada de tres años de prisión de cumplimiento efectivo, por haber desobedecido una orden judicial que le impedía acercarse a la vivienda de su ex esposa a raíz de haber sido excluido del hogar por un típico caso de violencia familiar.
La sentencia recayó en Juan José Carnero, de 38 años de edad, quien fue declarado autor responsable de “desobediencia a la autoridad”, aunque también se lo absolvió de otro hecho similar y de los delitos de “amenazas” y “coacción” que se le atribuían en la requisitoria de elevación a juicio.
Carnero se encuentra detenido desde julio pasado porque al momento de cometer los hechos por los que fue juzgado tenía pendiente una condena de tres años de prisión de ejecución condicional, dictada por la misma Cámara del Crimen el 18 de junio del corriente año.
En rigor de verdad, el irascible carpintero fue condenado en la víspera a seis meses de prisión por el único delito que se le probó en la audiencia de debate, dicha sanción debió unificarse con aquella que había sido impuesta en suspenso, por lo que finalmente se aplicó una única pena de tres años de cárcel de cumplimiento efectivo.
Para poder recuperar la libertad “condicional”, Carnero deberá pasar un mínimo de ocho meses entre rejas, de modo que estará en condiciones legales de dejar la cárcel de barrio Belgrano recién en marzo del año venidero.
El juicio fue presidido por el camarista René Gandarillas y contó con la participación del fiscal Francisco Márquez y del abogado defensor Juan Antonio Rusconi, mientras que el secretario actuante fue Roberto Jue.