La comunidad educativa del colegio "Sagrado Corazón" se unió para rodear la escuela con un abrazo solidario en repudio a los ataques que perpetraron contra el edificio.
El martes último, cuando la directora del Nivel Primario, Patricia Guebel, llegó a la institución, vio que había caños rotos y otros daños por lo que decidieron no dictar clases.
Al hacer la inspección junto a los directivos del secundario y terciario encontraron que los daños eran peores a los imaginados. Hasta habían echado combustible en el tanque de agua que provee del líquido elemento a los 200 niños que van al turno mañana.
También habían pintado en una de las paredes una cruz esvástica con la leyenda “morite”.
El abrazo de alumnos, padres y docentes fue un claro repudio de la tranquila localidad a ese inexplicable ataque.
Otras notas de la seccion Regionales
De muestra
Se viene otra gran jineteada
Los cargos que mañana votamos los cordobeses
Todos por Delfina
Festividad en honor a San Cayetano
|