Escribe Jesús Chirino
Pedro Miguel Martínez, nacido en Villa María el 31 de octubre de 1931, acaba de publicar el libro “Villa María, capital de la Nación (Consta en Actas)”, ocupándose del proyecto de ley que en 1871 establecía la capital en un territorio a federalizarse en las inmediaciones de nuestra ciudad y la vecina Villa Nueva. Ley vetada por el entonces presidente de la Nación, Domingo Faustino Sarmiento, aunque luego el Congreso Nacional trataría de insistir en su sanción.
Un investigador
El libro ha sido editado por la editorial de la Universidad Nacional de Villa María, Eduvim, como parte de la colección “Documento regional de Identidad”. En sus páginas encontramos facsímiles de documentos, datos estadísticos, el registro de sesiones en el Congreso Nacional, el veto de Sarmiento, comentarios que investigadores locales realizaron entre 1943 y 2003 y repercusiones en la prensa de la época.
Entrevistamos a Martínez, que posee varias obras publicadas, para hablar del libro. Nos manifiesta que es “un investigador de todo lo que sea la parte mistérica de la astronomía antigua, inclusive las cosas que han pasado en este planeta y que no han sido todavía bien resueltas”. Este hombre fue nombrado titular del Archivo Histórico Municipal cuando, bajo la intendencia de Horacio Cabezas, se fundó ese organismo como desprendimiento del Archivo General del municipio. Allí realizó un importante trabajo ordenando el material resguardado. Posee varias obras sin editar y en la entrevista nos muestra “La secreta astronomía antigua”, libro que espera su edición.
Este incansable trabajador que posee innumerables antecedentes laborales, es hijo de españoles. Su padre provenía de Almería, en tanto que su madre era originaria de La Rioja –España-. Cursó sus estudios primarios en la escuela Florentino Ameghino, en tanto que al Nivel Secundario lo transitó en la Escuela Superior de Comercio. Cuando le preguntamos si profesa alguna religión responde: “no, ninguna, ni religión ni política, yo vivo totalmente. La verdad es que no me entusiasma el asunto, sí estudiarlo. No participar en abrir juicios de valor…”
Cuestión capital
Ocupándonos del tema central del libro, indagamos por qué Martínez considera importante la posibilidad que, en algún momento, tuvo Villa María de ser considerada como territorio para establecer la Capital Federal. Refiriéndose a la obra recién editada, responde: “En primer lugar, así diciéndolo fríamente, es un libro tedioso pero a su vez lo atrapa porque usted dice ¿cómo Villa María con trescientos cincuenta habitantes que caben en una sala del cine, podía ser capital de la Nación ? Y cuando me lo presentaron –en alusión al acto del 9 de octubre en el rectorado de la UNVM-, el señor rector y el señor intendente quedaron muy… como si los hubiera convencido. Pero este es un trabajo de dos años y medio que yo estuve trabajando en Buenos Aires. Yo trabajé, para que vea, siempre con la plata de uno como laburador, estuve en la Dirección de Migraciones para comprobar los ingresos de las personas que se nombran en el trabajo del libro, en el Ministerio de Defensa para los partes militares de la época cuando los indios asolaban esta región que, o casualidad no asolaban a Villa María. Nunca se supo que vinieran a Villa María, solamente por lo que decía el coronel Joaquín Viejobueno que también lo estuve rastreando y su padre y su abuelo fueron militares de alta graduación en la época de Rosas. Luchaban a favor de Rosas. Todas esas cosas me ha parecido comentar, y sobre todo las sesiones de las cámaras de Senadores y Diputados que es como cuando dicen contamos los porotos. Y usted dice, pero Villa María ¿quién la eligió? Pero usted piense ¿quién habrá conocido Villa María? Pero Villa María tenía dos ferrocarriles, como dice el senador Aráoz que es como si prácticamente hubiera vivido en este pueblo, era un hombre del interior, era senador por Tucumán y Guillermo Rawson, famoso médico que fue diputado por San Juan esos dos hombres usted viera lo que lucharon por Villa María y usted dice pero ¿por qué? Cuando se va leyendo el libro se da cuenta por qué Aráoz vino acá a Villa María y dijo que era una población de cuatrocientos treinta habitantes muy progresista. O sea había movimiento, incluso hice la estadística de Villa María en relación al país de aquella época”.
Razones
Martínez, apasionado con el tema, señala que la ley “dice declárese capital permanente de la república, yo estudié abogacía y ese permanente no es lo mismo que nada, cuando no dice permanente es a libro cerrado –habla del tratamiento del proyecto- es que ese tema no se toca en el resto del año. En cambio Villa María fue y fue, hasta que tuvo que intervenir Sarmiento y las fuerzas oligárquicas de aquella época y los grandes holdings bancarios…”
Indudablemente ama la ciudad, sus ojos se avivan y continúa diciendo “el decreto es único y no puede destruirse algo que ya está jurídicamente aprobado –cita de memoria- declárase capital permanente de la República la ciudad de Villa María. Un gran error no era ciudad, en eso de decir que no es ciudad perdieron un montón de tiempo los senadores y diputados pero cuando entró y tomó la palabra Aráoz, hacé de cuenta que era un orador griego, explicaba por qué Villa María podía ser capital, en una de esas dice que con los dos ferrocarriles eran 44 trenes por semana. Aráoz decía un lugar que tiene tierras altas, muy buena agua”. Martínez reafirma que Aráoz conocía y había estudiado sobre estas tierras.
Sarmiento había escrito su parecer acerca de cómo debía ser la capital del país. Le preguntamos a Martínez si sostiene que Villa María no fue capital, en parte, porque el proyecto de Sarmiento era utópico. Rápidamente responde “Claro. Sarmiento y Mitre, porque vamos a decirlo en la general, no iban a permitir eso de alguna forma. Ahora si usted lo piensa bien parte de razón tenían. Usted se imagina tenían que hacer una ciudad nueva y la inversión era la mitad de lo que le había dado Inglaterra en libras esterlinas para el Gobierno de Rivadavia”
Martínez tiene muchas cosas más para contar de aquellos sucesos que mantuvieron el nombre de Villa María en el debate nacional, pero el espacio de esta nota es limitado. Para continuar con el tema está el libro, que junto al resto del material de Eduvim, puede adquirirse en las librerías.
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