El fallo condenatorio sorprendió al fiscal de Cámara Francisco Márquez y a los numerosos periodistas presentes ayer, en la última audiencia del juicio que se le siguió a Lorena Velozo, por la muerte de su hija, la que nació luego de entre siete y nueve meses de gestación, a las 3 de la mañana del 14 de julio de 2008, en Ticino.
Ni bien conocido el veredicto, la prensa rodeó al funcionario judicial. “Es prematuro decir algo sin leer los fundamentos”, expresó.
“No es ni mucho ni poco, el Tribunal no coincidió con la valoración de la prueba realizada por este Ministerio Público”, dijo cuando los cronistas le preguntamos.
Más tarde, Márquez subrayó que “el fiscal no es el cuarto vocal” de la Cámara, en alusión a que son los jueces los que fallan y no él.
“Veremos los remedios procesales que tenemos”, agregó.
- ¿Cuando dice eso, está adelantado que casará la sentencia?, le consultó EL DIARIO.
- “Sí”, respondió.
El acusador público recalcó que “esta profesión nos obliga a evaluar las posibilidades y el tribunal es libre de hacer su respectiva valoración de las pruebas”.

@ Se develó el misterio

Para los jueces, la niña nació con vida. La duda sobre eso había sobrevolado el debate oral y público.
Lo que no sabe es si los jueces consideraron que el abandono se dio en el garaje en que Lorena Velozo dio a luz o en el basural, distante a mil metros de ese hogar. Esto último había sido descartado por Márquez.
Para evacuar todos los interrogantes, habrá que esperar hasta el mediodía del 10 de noviembre próximo, cuando la Cámara del Crimen dé a conocer los fundamentos del esperado fallo.