Tres delitos contra la propiedad se registraron en las últimas horas: un robo, un asalto y un hurto, en ese orden, informó la Policía.
Dos de ellos ocurrieron en Villa María y el tercero en la zona rural de Pasco.

Una moto

En primer lugar, resultó víctima de los ladrones María Aquino, quien denunció en la oficina de la División Investigaciones de la Departamental que los amigos de lo ajeno le habían sustraído su motocicleta.
Se trata de una Honda Wave verde dominio CQW 264 que ella misma había dejado estacionada en la calle Mendoza, a la altura del 1600, con la traba de volante accionada. De nada le sirvió.

Asaltante en bicicleta

Oscar Vergara, carnicero de barrio Ameghino, tal vez pensó que aquella sería la última venta del día cuando, alrededor de las 21 del martes, vio entrar a su local de Intendente Peña al 100 al hombre que acababa de bajarse de la bicicleta.
Sin embargo, no tardó en darse cuenta de que estaba muy equivocado. Aunque el “cliente” actuara a cara descubierta, el cañón del revólver que lo apuntaba fue más que elocuente.
Mediante amenazas que no dejaban lugar a la discusión, el solitario delincuente le sustrajo al comerciante, que no intentó defenderse, más de 400 pesos en efectivo, la recaudación de la jornada.
Con el dinero en el bolsillo, el caco volvió a trepar en la bicicleta playera para huir hacia las sombras de la noche.
Poco después, una vez formulada la denuncia ante efectivos del Comando de Acción Preventiva, los uniformados encontraron abandonada la bicicleta en la que había escapado el ladrón.

Herbicidas y algo más

El tercer hecho ocurrió en el galpón de un campo ubicado en la zona rural de Pasco y fue denunciado ayer por la mañana.
Efectivos del destacamento de aquella localidad recepcionaron la denuncia de Héctor Daniele, propietario de un predio ubicado a unos seis kilómetros del casco céntrico, quien expuso que, aparentemente durante el pasado fin de semana, los delincuentes habían ingresado al galpón en cuestión para hacer de las suyas.
Los desconocidos se llevaron 30 bidones del glifosato, dos bidones de aceite YPF AT 40 y un generador Dowan 700 de 220 watts.
Se descarta que los bandidos rurales circulaban a bordo de un vehículo de carga, presumiblemente, una camioneta.