Escribe: Fabio Morisetti

En un partido para el olvido, Rivadavia superó por la mínima diferencia a Ricardo Gutiérrez gracias a un cabezazo de Maxi Damiano. Apenas el gol y los últimos diez minutos se pueden rescatar de un cotejo realmente muy aburrido, en donde las jugadas de peligro escasearon y las ideas prácticamente no se hicieron presentes.
Apenas iniciado el juego, el “RG” contó con dos chances claras desperdiciadas. Después de eso, la nada. O casi.
A los 24, avisó Damiano, quien cabeceó desviado un centro de Cabrera, pero el partido volvió a entrar en el sopor del que recién salió a los 32 cuando Erregarena habilitó a Agosto, quien volvió a pegarle de zurda y en forma defectuosa.
A los 40, Bersano sacó un fuerte derechazo que impactó en la humanidad de López. Todos los de “Tierra Santa” reclamaron penal, pero el árbitro juzgó que no hubo intención.
La primera media hora de la segunda parte siguió en la misma tónica. Sólo un pequeño puñado de situaciones llamaron la atención.
Pero llegó la emoción a los 25, Damiano hizo lo que mejor sabe y metió un cabezazo angulado que dejó sin chances al arquero palestino para poner en ventaja al verde.
Sobre el final, Fantino salvó las papas ante la búsqueda del empate del rival y después ya no hubo tiempo para más.