El pasado fin de semana, el Teatro Verdi contó con dos propuestas totalmente distintas pero igual de convocantes, a decir de la taquilla.
Alrededor de 300 personas (la capacidad total asciende a 675) asistieron en cada una de las puestas teatrales agendadas en cartelera.
El sábado a la tarde, cientos de niños junto a sus papás y familiares vivenciaron el fenómeno en vivo de “Ben 10” (foto 1), el dibujito de moda que se emite por Cartoon Network.
La cola para entrar a ver las aventuras de ese pequeño que, mediante un mágico pasaje se puede convertir en diez superhéores alienígenas, se comenzó a armar una hora antes de lo previsto. Al no haber entradas numeradas, las primeras ubicaciones eran el trofeo a conseguir.
En tanto, el domingo por la noche, la platea se componía especialmente de adultos y en esencia, por aquellos ávidos de chimentos vergonzantes de la farándula vernácula.
El conductor de “Intrusos en el espectáculo”, Jorge Rial (foto 2), dio muestras de sus dotes de entretenedor “canchero” y un tanto procaz, con un repertorio de “dardos venenosos” a las celebridades (y pseudo figuras) nacionales.
Provisto de imágenes en pantalla, “El ángel y demonio del espectáculo” trituraba a divas como Susana y Mirtha mostrando las fotos “verdaderas”, sin photoshop.
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