Fue aprobado por el Concejo Deliberante en primera lectura y por unanimidad un proyecto de ordenanza del Departamento Ejecutivo Municipal llamando a licitación para la instalación de “cámaras de seguridad públicas”.
La convocatoria había quedado desierta meses atrás, debido a que el monto presupuestado era inferior al solicitado por los interesados. El proyecto de licitación aprobado ayer eleva el presupuesto a 1,9 millón de pesos.
“Las cámaras permitirán brindarle una mayor seguridad a los vecinos a través de una herramienta tecnológica que en otros lugares está arrojando muy buenos resultados y que posibilitará la detección de anormalidades o transgresiones para actuar en el momento oportuno”, se asegura desde el oficialismo.
A decir verdad, en los albores de la democracia una medida de estas características hubiese sido considerada como absolutamente represiva, conculcatoria de libertades individuales. Hoy, con un retroceso institucional apreciable, se acepta casi sin rubor que los que no pueden atacar las causas de la pobreza y las desigualdades opten por filmar sus consecuencias.
“El proyecto prevé la colocación de 15 cámaras de alta resolución en lugares de la ciudad determinados estratégicamente en un trabajo conjunto entre el municipio y la Policía”, dicen. Y anticipan (por si usted prefiere dar la vuelta por otro lado) que estarán ubicadas en Mendoza y Sobral, puente Alberdi (ingreso y egreso por ruta 4), avenida Presidente Perón y Paraguay, prolongación Sarmiento y avenida Universidad, Buenos Aires e Intendente Reyno, entrada de autopista por ruta 158 y bulevar Argentino, Buenos Aires e Yrigoyen, plaza Centenario, Entre Ríos y San Martín, Sarmiento y Alvear, Cristo Redentor, Dante Alighieri y costanera, Vélez Sarsfield e Italia, Rawson y Larrabure, Vélez Sarsfield, España y bulevar Argentino en la salida por autopista.