Una de las virtudes que ha plasmado la danza contemporánea en cuanto a su acercamiento al público mayoritario ha sido la expresividad conceptual de sus cuadros coreográficos.
Es decir, y parafraseando el conocido refrán, su consecución de movimientos armónicos y arrebatos interpretativos dicen más que mil palabras.
El Grupo en Danza, dirigido por el profesor Raúl Oliva, estrenó el pasado fin de semana la puesta "Departamento" en la sala El Globo Rojo. Con cierta proximidad de la audiencia al propio espectáculo, el elenco logró "internar" al asistente a una composición lúcida y crítica sobre la vida cotidiana intramuros. En tres cuadros por separado, se desarrollaron las escenas de alto peso simbólico y de demandante entrega física por parte de los intérpretes. Una mujer atormentada por sus angustias y desazones decide descerrajarse un tiro en la boca (deliciosa inclusión de la voz herida de Piaf en consonancia con ese gorrión mojado y pálido que se asemejaba a la protagonista). Luego una joven obsesiva con la parafernalia estética y la dictadura de la imagen vomita en un inodoro, en cierto plan anoréxico. Por último, una pareja discute violentamente hasta que se devela el trágico destino de su retoño. Aquí, las destrezas estilísticas y las exigencias a la hora del trabajo a dúo fueron premiadas por un aplauso cerrado del público (N de R: en función del domingo).
El elenco estuvo compuesto por Florinda González, Natalia Oliva, Marcelo Bizarri y Eliana Oliva. Por su parte, Natalia Balduzzi se sumó en los pasajes de apertura donde se plasmaron fragmentos de “Coppelia”, “Giselle” y “La Ephimére” y “Ayres” de la propia compañía.
Juan Ramón Seia