El pasado fin de semana, en la ciudad belga de Willebroek, alguien tuvo la brillante idea de robar entre 3.000 y 4.000 iPhones de un almacén. Las instalaciones pertenecen a Ceva Logistics, una empresa de transporte estadounidense con delegación en los Países Bajos. La Policía sospecha que el ladrón o ladrones tenían algún contacto dentro del almacén porque parecían saber exactamente dónde estaban los dispositivos de Apple. Un portavoz de Mobistar, el operador belga que comercializa en exclusiva el iPhone, ya ha anunciado que todos los terminales robados han sido bloqueados y no podrán usarse. Bueno, para ser más exactos parece que no podrán usarse con Mobistar, pero sí con otros operador al no haber un bloqueo SIM en Bélgica. No está muy claro el número exacto de teléfonos que fueron robados y cada medio de comunicación da una cifra diferente, pero todos coinciden en que el robo supone unas pérdidas de dos millones de euros.
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