Entrevista: Gustavo Ferradans
(De nuestra redacción)

Germán Lauro es uno de los atletas más reconocidos del país, fue varias veces representante argentino en diferentes competencias internacionales y ostenta el récord nacional en el lanzamiento de bala. El oriundo de Trenque Lauquen, de 24 años fue representante argentino en los Juegos Olímpicos de Beijing justamente en esta prueba.
Lauro estuvo de paseo durante varios días en Villa María, visitando a su novia (Daniela, una de las gemelas Crespo), acompañando la familia luego del fallecimiento del abuelo paterno de las atletas y descansando luego de su experiencia inolvidable que fue estar en China, en el encuentro deportivo más importante del planeta cada cuatro años.
EL DIARIO, tuvo oportunidad de dialogar con el lanzador y recibir algunas de las impresiones que le dejó estar en los mencionados juegos.
Por segunda vez de visita en la ciudad, antes había sido en enero, el atleta señaló en broma antes de empezar la entrevista “no sé si habrá una tercera vez…Nooo, es un chiste que tenemos con las mellizas, ellas con mi ciudad y yo con la de ellas. Me tratan siempre bien cuando vengo… Siempre me esperan diez puntos, espero poder volver”.
Lauro estuvo presente en la inauguración de la Copa Nacional de Cadetes, realizada en el Polideportivo de esta ciudad, pero fue en la casa de la familia Crespo donde atendió muy cortésmente a este medio para dialogar un largo rato

¿Hace pocos días regresaste, que rescatás de esta experiencia?
- “Es un torneo espectacular, inolvidable, porque yo siempre digo que es el mundial de mundiales. Porque acá se reúnen todos los deportes para realizar su mundial, en una misma ciudad y al mismo tiempo. Eso genera los Juegos. Además por la movida mediática que genera es un poco lo que hace tan grande este torneo.”
El convivir con otras disciplinas durante tantos días es algo poco habitual. Los ves en el Cenard, pero no convivís con ellos tantos días…
“Eso también hace grande a este torneo. El hecho de juntar a todos los mejores deportistas de las diferentes disciplinas y tener la posibilidad de tener que cruzártelos continuamente, capaz que ni en tu vida tenés la posibilidad de cruzártelos así. Nosotros íbamos al comedor y estaban los jugadores de la NBA, los grandes del tenis, cualquiera se volvería loco por vivir esa situación.”
Participaste en el primer día de competencia del atletismo en los Juegos Olímpicos; ¿Qué balance hacés de tu participación?
- “Por suerte me tocó competir en el primer día. Creo que hay veces que competir en los últimos te genera más ansiedad. Mi balance fue positivo sin dudas, porque la idea era de hacer experiencia y ver que era un juego olímpico. Sin dudas que salió bastante bien. Estuve dentro de los 19 metros, que era lo importante. Quería mantener una media buena para seguir mejorando. Este 2008 fue complicado porque tuve una lesión en el codo, estuve dos meses sin poder tirar. El hecho de no tener muchos torneos, hizo que casi no compitiera. Llegué a los Juegos con, creo, cinco competencias y en 2007, a esta altura ya tenía más de 30 competencias realizadas. Eso se notó en mi nivel de confianza en la competencia. De todos modos es un resultado más que positivo, más que nada me di cuenta que no estoy tan lejos. No estuve en la marca que yo quería, pero estuve a un metro de clasificar a la final, así que eso me dice que tan lejos no estaba de los que están más arriba.”
Supongo que fue una presión extra la de competir con 90 mil personas observándote…
- “Sí, sí es así. En el Mundial de 2007 no hubo tanta gente. A la mañana que eran todas clasificaciones no había tanta gente. Sí por la tarde, que había más finales. Pero en Beijing, desde la mañana había muchísima gente, todos los días igual. El atletismo en los Juegos es el deporte que más gente moviliza, y sin dudas que eso genera un poco de presión al no estar acostumbrado. Yo siempre digo que cuando se discute y pedimos la posibilidad de competir afuera, conseguir torneos de nivel, el tema es ese. Conseguir torneos de ese nivel. Hay atletas europeos que desde muy chicos están acostumbrados a competir en esa calidad de torneos y de presiones. Y nosotros vamos con desventaja, somos nuevos en ese ambiente y un poco influye. Pero mi objetivo es Londres 2012, me todavía me falta crecimiento. En este deporte hay que saber esperar y saber bien los tiempos de cada uno. La mayoría para Londres tendrá mayores expectativas. Ahora hay que trabajar cuatro años para llegar con alguna aspiración a los próximos juegos.”
En los Juegos te toca competir contra atletas que tiene otros sistemas de competencias, infraestructura y de apoyo, que acá, como ya se sabe, es escaso.
-“Es siempre la misma discusión luego de un torneo de este tipo. Se hace el balance y siempre se saca la misma conclusión: ‘Que el Estado no ayuda tanto a los deportistas’. No sé si hubo alguna vez una política deportiva, con la idea de fomentar el deporte. Creo que se tapa los agujeros con parches y no se genera que los deportes menos conocidos se desarrollen, no sólo el fútbol o los más populares. Creo que hasta que no se desarrolle una política deportiva, el deporte argentino no va a crecer demasiado. De todos modos salen uno, dos o tres talentos, que deslumbran, pero más que eso no pasará nunca nada. Cuando se habla de la garra de argentino se trata de eso. Es el hecho de pelearte con todo el mundo para conseguir un peso. Creo que los dirigentes deberían allanarte el camino pero no hacen más que meterte trabas.”

¿Ahora, para el resto del año, cuáles son los objetivos?
- “Ahora me voy a dedicar un poco a la facultad. Estoy estudiando para contador, tengo que meter materias. Me queda la Copa Nacional de Clubes y el Argentino de mi categoría. Mi idea es seguir entrenando y ver si puedo alcanzar un lanzamiento de 21 metros antes de fin de año. Sería muy bueno para encarar el año 2009 con otras expectativas, ya que tengo la marca para el Mundial del próximo año.
La idea es planificar cuatro años, para llegar a Londres en la mejor forma y tener alguna aspiración. Tener un sponsor asegurado, que facilitaría el entrenamiento. A nosotros nos pasa de querer entrenar en otro lugar y estamos renegando hasta el último tiempo con el tema de si vamos a lograr reunir todo el dinero.”