Escribe: Pepo Garay
Especial para EL DIARIO

“Hoy es el día del canto, va a comenzar la cosecha. Una cosecha de coplas, que en nueve noches se siembra”. Venga amigo, cargue esa guitarra al hombro y arranquemos nomás. Venga pues, caminando derechito por Avenida San Martín. Ahí está la Plaza ¿la ve? Prospero Molina, el templo mayor de nuestra música. Qué maravilla. Venga le digo, venga.
Pero mire, antes de que entremos, mire lo que es esto. Los espectáculos callejeros, el encuentro de poetas. ¡Las peñas! ¿Y eso qué es? Congreso Nacional del Hombre Argentino y su Cultura, ¡claro, me había olvidado! Y la Feria Nacional de Artesanías también. La Feria del Libro, los Talleres Culturales…pavada de festival che.
“A la huella, a la huella, Cosquín te llama. A la huella del canto que nos hermana” ¿Cómo dice? ¿Qué nunca había estado acá? No le creo compadre. Mire lo que esta Plaza explota. Cincuenta años cumple Cosquín. Legendario. Y vienen todos, no se vaya a creer: Jairo, Soledad, Víctor Heredia, León Gieco, Los Nocheros, El Chaqueño, Los Carabajal… la verdad es que a mí me gustaba más cuando estaban Cafrune, Yupanqui, Guarany, Merecedes Sosa… para qué le voy a mentir. Pero bueno, los artistas de ahora también son un lujazo, eh ¡qué me voy a quejar yo! Igual, y justo que hablábamos de Mercedes Sosa: este año le van a hacer un homenaje a la Negra. Va a estar imperdible.

Medio Siglo

¡Cincuenta años! Si usted supiera la de historias que hay alrededor de todo esto. Anécdotas, cuentos, leyendas. Todo un universo movido por la música. Así nos hemos criado todos los de acá, alrededor del festival, alrededor del folclore. ¡A ver si hay algún guapo que me venga a hablar a mí de electrónica y esas cosas de ahora! Ahí no hay espíritu che, no hay pasión. Bueno, basta, nos concentremos en cosas más gratas ¡Hablemos de folclore, canejo!

Un triunfo
de todos

“Este es un triunfo de todos, porque es un triunfo de paz. Vengan del sur y del norte de Cuyo y del litoral”. Hay cualquier cantidad de gente, fíjese, y de todos lados. De todas las provincias hermanas, y hasta de Chile, Uruguay, Paraguay. Como para que no, ¡si Cosquín es el ombligo del mundo, hermano! Y no sólo por la música. Mire lo que son los paisajes, el clima. Estamos bendecidos. Mañana lo voy a llevar a recorrer los alrededores.
Escuche: vamos a ir a hacer una caminata por el Pan de Azúcar, y de paso compartimos unos mates con la paisanada. No sabe las vistas preciosas que tiene uno del valle ahí arriba. Después partimos para La Toma. Ese es un clásico, eh, con las piedrotas gigantes, son unos monstruos. Más adelante está el punto donde se cruzan el Yuspe y el San Francisco, los dos ríos de acá. Una cosa preciosa le digo. Pero eso mañana, ahora vamos a seguir disfrutando del festival. Venga, sígame.
“Cosquín tiene en su nombre una campana, templada con el canto de las guitarras”. Ahora sí, a afinar cuerdas se ha dicho. Prepare la garganta compañero, y vamos nomás. ¿El bombo suena, no? Qué espectáculo. Ahí está amigo. Sírvase un vaso de oscuro, que yo invito. Miré que le vamos a dar duro y parejo, así que vaya aflojando el codo. Vamos a andar de empinada esta noche, sí señor. Usted doña, a ver si se trae una empanaditas que voy a compartir con mi cumpa acá. Muy bien. Estamos como queremos.
“Vengan a ver el milagro, Cosquín empieza a cantar”. ¿Cómo? ¿Que ya se tiene que ir? Pero no, amigo ¿adónde se va a ir usted? Quédese, quédese a disfrutar de esta fiesta ¡La fiesta de la cultura nacional! Ahí está, compañero, retome ese asiento y a seguir revolucionando los sentidos. Esto es un suceso, supera la realidad ¿o acaso no escuchó el final de la canción? “Vengan a ver el milagro”, dice el cantor. Y sí. Créame compadre, esta noche no se va a terminar nunca.

Epígrafes de fotos: 1)Una auténtica postal de la última edición
2) La Plaza Próspero Molina aguarda a la multitud