Los que viajan en ómnibus son, en su mayoría, jóvenes. ¿Matrimonios y familias? “Supongo que viajarán en auto”, señaló uno de los consultados.
El recorrido que EL DIARIO realizó ayer por las distintas boleterías de la Estación Terminal de Omnibus arrojó la conclusión de que la juventud copó estos coches en estas vacaciones.
El movimiento, de acuerdo a los dichos de los entrevistados, es igual o menor al del año pasado para esta misma época. Las respuestas fueron dispares. Por caso, Marcelo, de Chevallier, admitió que la demanda cayó un 30% en relación al verano 2008-2009, aunque para las fiestas de fin de año, la demanda fue abrumadora.
“Después de las fiestas, llegó el receso”, señaló.
Indicó que es “muy baja” la cantidad de personas que eligieron a las sierras de Córdoba como destino, aunque existe buena venta para la costa atlántica. “Pinamar y Villa Gessell (204 pesos el pasaje) tienen mayor demanda que Mar del Plata”, reveló.
Una situación diferente se da en Plus Ultra, donde Camboriú es un exitazo. “La venta en esta empresa se incrementó un 40%; y es increíble el crecimiento de pasajeros de Villa María y la zona que eligen a Brasil”, señaló Germán.
A Villa Carlos Paz, viajan 120 villamarienses por día (o gente de la zona), en cuatro servicios que provienen de Buenos Aires. “De 120, diría que 95 son jóvenes, 15 adultos mayores y diez matrimonios con hijos”, puntualizó.
Hacia Mardel, en tanto, viajan 30 pasajeros diarios de la ciudad y región -sobre todo, de la zona- en tres servicios, en los que sobresale la presencia de matrimonios.
“La juventud no va a Mar del Plata, se va a Gessell o a Carlos Paz”, indicó.
Además de Brasil, también tiene muy buena respuesta Punta del Este, ambos destinos con pasajes agotados hasta febrero.
En cuanto a precios, ida y vuelta a Camboriú está a 840 (semicama) y 960 (cama); 520 pesos Punta del Este y 408 Mardel.
Por su lado, en Urquiza, Rodrigo contó que es “importante” el movimiento, sobre todo a la tarde y “similar” al de un año atrás.
“La juventud es la que viaja y lo hace a Carlos Paz, Mina Clavero... Muchos porteños pasan rumbo a las sierras , arribando micros completos a la ciudad. No se ven familias”, expresó.