El glaucoma comprende un conjunto de enfermedades que tienen en común un aumento de la presión intraocular. Es una de las principales causas de ceguera en el mundo. La frecuencia de glaucoma en personas mayores de 40 años es entre el 1 y 2%. La consecuencia de esta enfermedad es el deterioro de la visión, que va desde la visión borrosa a la ceguera total. Generalmente es una enfermedad bilateral.
El glaucoma agudo comprende menos del 5% de los glaucomas en general.
La mayoría de los casos de ceguera pueden ser prevenidos si se instituye el tratamiento en los primeros estadios. La terapéutica actual es muy variada, y va desde tratamiento con colirios, rayo láser y cirugía, según la respuesta de cada caso.
Se ha desarrollado un número importante de pruebas diagnósticas especiales para ayudar a descubrir, clasificar, y seguir la evolución del glaucoma. Brevemente se pueden mencionar entre otras a :
1. Tonometría: es una prueba importante para establecer el diagnóstico de glaucoma, ya que mide la presión ocular.
2. Campo visual: determina la integridad funcional de la retina, el nervio óptico y las vías ópticas.
3. Paquimetría: últimamente se ha demostrado la incidencia del espesor de la córnea en la presión ocular.
4. Fondo de ojo: los cambios en la papila óptica son signos iniciales importantes.
Aunque la enfermedad es casi siempre bilateral, es frecuente encontrar un ojo más comprometido que el otro. Al menos el 90% de los glaucomas primarios son de ángulo abierto, esto significa que es bilateral, de poca manifestación al principio, progresivo, y que cuando se da el deterioro visual a menudo es demasiado tarde para rescatar la visión perdida.
Esto hace que la forma de combatir esta enfermedad sea la prevención: es responsabilidad del médico el diagnóstico precoz, y fundamentalmente responsabilidad de los mayores de 40 años, de realizarse los estudios pertinentes para descartar una enfermedad a la que los años nos hace más propensos, y que nos puede llevar a un importante deterioro de nuestra calidad de vida.
Sólo mencionaré que esta enfermedad también se puede padecer desde el nacimiento, pero este caso será para desarrollar en otra oportunidad.
Dr. Eloy Raúl Baigorrí
Centro Privado de Oftalmología