@Desde barrio Mariano Moreno de Villa María

Señor director:
Hace cuatro meses, en la avenida El Palmar de barrio Mariano Moreno, la Municipalidad comenzó una obra de pavimentación que sólo trajo ríos de lodo por las calles, destrucción de cloacas, lesiones de transeúntes y otras numerosas calamidades para los vecinos. Lo curioso del hecho es la ineptitud de los hacedores, que no previeron la temporada de lluvias que llegaría con el verano; que debieron bajar y subir la altura de la calzada hasta dejarla -en las dos últimas cuadras- con un metro de profundidad; que ni siquiera se dignaron a cerrar las esquinas, y que demostraron una indiferencia absoluta hacia la seguridad de sus vecinos, quienes llevan noventa noches sin poder guardar los autos, los cuales en algunos casos fueron saqueados por ladrones. Pero esta enumeración apenas menciona los títulos de las problemáticas, porque si vemos un poco más hondo, encontramos el impacto real que ha tenido este proyecto en el nivel de vida de los habitantes. Por ejemplo: la doble rotura de las cloacas, provocada en principio por el pésimo cálculo de los ingenieros y luego por el olvido de cerrar las bocacalles, generó olores repugnantes; el barro en las calles provocó caídas de motociclistas y peatones; el descenso del nivel de la calzada puso en peligro la estabilidad de las palmeras, que con las raíces a la vista, pueden caer en la cabeza de algún transeúnte; por último, en una zona de inundaciones, descender el nivel natural de la calle hará posible el ascenso del río hasta las casas de los vecinos cercanos.
En fin, ante una situación como esta, observar el desinterés de los responsables, que llevan tres semanas de vacaciones, no sólo indigna, sino también pone en evidencia la falta de compromiso hacia su trabajo y hacia sus semejantes. Además, cabe destacar el golpe a la salud del barrio y la ciudad, permitiendo la formación de lagunas de hasta veinte metros donde se reproducen los mosquitos y con ellos, probablemente, el dengue. Por último, la obra de pavimentación tendrá un impacto ambiental negativo respecto a las históricas calles de tierra de la zona, ya que donde antes había un equilibrio entre el río y la urbanización, ahora tendremos una pista de asfalto contaminando el suelo.

Santiago Nayangore
DNI 31300483

@Desde barrio Costa de Oro de Villa Nueva

Señor director:
Venga y disfrute de la emoción del “DAKAR” en Villa Nueva. Sí, acá nomás, apenas a tres cuadras de la costanera.
Prepare su automóvil, refuerce la suspensión, agregue una jaula antivuelco, incorpórele un malacate, compre cubiertas pantaneras, cargue una motosierra o hacha, póngase la botas altas y encare para el barrio Costa de Oro.
La primera etapa es complicada, se trata de cruzar el barrio Empleados de Comercio, allí los pozos, los zanjones, las cortadas y las lagunas harán de su travesía una aventura extraordinaria.
La segunda etapa se inicia saliendo del barrio anterior y atraviesa el barrio Rincón Escondido. Acá la cosa se pone grosa, deberá sortear grietas de tamaño considerable, pantanos, árboles caídos sobre el camino, calles ya perdidas y todo esto entre medio de yuyales de altísimo porte que le impedirán ver lo que queda de las calles.
La tercera etapa, es la aventura final, usted llegará, si puede, al barrio Costa de Oro.
Si su vehículo todavía resiste, podrá disfrutar de calles poceadas, cortadas profundas, árboles caídos, podas de más de un mes sin juntar, canales o riachos que cruzan el barrio sin ningún tipo de cauce ordenado, pantanos y hasta postes de teléfono caídos desde hace ya más de dos semanas por un viento.
Me pareció que algo de humor podría reflejar gráficamente lo que nos toca vivir a los vecinos de los barrios citados a diario.
Hace seis años que vivo en el barrio Costa de Oro, es hermoso, pintoresco y con buena gente, pero parece que para la Municipalidad de Villa Nueva no existe.
Da vergüenza ver la desidia y la dejadez de parte del municipio en lo que respecta a servicios.
Todo lo que se ve como mejoras, la hicieron los vecinos a pulmón.
Yo tengo domicilio y pago mis impuestos en Villa Nueva ( casa, terrenos, autos, etcétera), pero a cambio no recibo nada, ni siquiera la posibilidad de que nos arreglen las calles ni hablar de un cordón cuneta o apenas un buen nivelado y cuneteado de las calles, algo de arena (que abunda en la zona) para que no se formen pantanos, un poquito de atención nada más.
Le pido al intendente, que equilibre la distribución de los escasos recursos con que cuenta y le preste atención a los barrios más nuevos de la ciudad. Que presente alternativas y las discutamos con los vecinos, seguramente en conjunto lograremos sacar las cosas adelante, pero que no nos ignoren.
Desde ya, muchas gracias a EL DIARIO por permitir que nos expresemos.
Ernesto Garanzini
Barrio Costa de Oro
Villa Nueva