Natalio Graglia (foto) precisó que el municipio está terminando el relevamiento de árboles caídos y señaló que si bien cayeron árboles grandes, mayormente se produjo roturas de ramas.
En el Parque Yrigoyen, en tanto, “cayeron cuatro ó cinco árboles, el resto son ramas de gran tamaño, que obviamente acarrean problemas”.
Sobre el plan de reforestación anunciado por el Ejecutivo, el funcionario indicó que “debemos tener en cuenta la época” y que “en los próximos días, cuando tengamos el relevamiento listo, veremos qué especies nos conviene y cuántas compraremos”.
“Queremos tener árboles adecuados para la situación, porque una tormenta de ésta termina tirando todo”, advirtió.
Consultado por los sectores más castigados, señaló que por la caída de árboles inmensos fue el Costa de Oro.
En tanto, por las inundaciones, la situación fue delicada en el barrio Centro Empleados de Comercio.
El Golf, por su lado, tuvo “calles complicadas y ramas caídas, aunque no hay tantos árboles”.
“Había muchos olmos, que tienen grandes raíces y rompen todo, pero la gente los fue sacando y remplazando por otras especies”, puntualizó.
Graglia dijo que “el resto son gajos y ramas” que se erigen en obstáculos.
“En el Parque hay eucaliptos y por lo general se caen, sobre todo con una tormenta de esta naturaleza y todo eso hay que analizarlo, para convenir qué especie nos podría ser útil”, consideró.
El funcionario explicó que en algunos sectores de la Villa ya están realizando el segundo recorrido, pero advirtió que las tareas habituales de la Secretaría a su cargo se retomarían recién en 30 días, cuando esté en condiciones la ciudad.